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Hoy hablamos Episodio 2050 el rodaje de el Mago de Hoz Bienvenido a hoy hablamos, el podcast para aprender español cada día. Si te haces suscriptor Premium podrás escuchar el Catálogo Completo del Podcast con más de 2000 episodios. Tienes más información en HoyHablamos. Com. ¿Hola oyente, qué tal?
Continuamos con el tema el mes, donde estamos viendo los rodajes de algunas películas muy conocidas. Hoy veremos qué pasó detrás de las cámaras de una película muy especial. Una película de la que los hermanos Coen dijeron que todas las películas americanas son remakes de ella. Hoy hablamos de qué pasó en el rodaje de el mago de Oz. Imagínate que escuchamos esta si alguna vez vuelvo a buscar el deseo de mi corazón, no buscaré más allá de mi propio patio trasero, porque si no está ahí, nunca lo perdí del todo.
No hay lugar como el hogar. Junto a estas palabras se escucha una canción que empieza así Somewhere over the rainbow, way up high. Todos de manera inmediata pensamos en Dorothy, el espantapájaros, el hombre de hojalata, el león cobarde, Totó y el camino de baldosas amarillas. Hoy vamos a conocer qué pasó detrás de las cámaras en esa película tan mítica como es el mago de Oz. Hablar del mago de Oz es hablar de una de las películas más importantes de la historia del cine.
La película se estrenó en 1939 y es una de las primeras películas destinadas al público infantil. Y sin duda se recordará porque supuso el perfeccionamiento de esa técnica conocida como el technicolor, que hizo que fuera la película con los colores más fantásticos hasta ese momento. Aunque esto, como veremos más adelante, trajo una serie de problemas. En el año 1989 fue considerada cultural, histórica y estéticamente significativa por la Biblioteca del Congreso de EE.UU. y fue seleccionada para su preservación en el National Film Registry.
Además, es de las pocas películas que han sido consideradas como Memoria del Mundo de la UNESCO. Pero por el camino hasta llegar a ser esta obra de arte que todos conocemos, hubo que pasar por un rodaje que fue una auténtica pesadilla. De hecho, debido a todos los problemas que ahora veremos, que el presupuesto se disparó y que el rodaje se prolongó cinco meses, la Metro Goldy Mayer se llegó a plantear cancelar el rodaje. Vamos a ver qué pasó. Lo primero que hay que decir es que ya fue complicada la preproducción, es decir, la preparación de la película, porque para encontrar el formato adecuado y dar con el guión definitivo, el estudio contrató a 12 guionistas diferentes.
Pero después del desfile de diferentes guionistas, quedaba el de los diferentes directores que se hicieron cargo del film. Primero fue Richard Thorpe, pero lo expidieron a los 12 días porque su versión era demasiado infantil. Luego vino George Cukor, aunque este era solo de paso, mientras se encontraba otro candidato que sería Mervyn Leroy, pero también fue despedido. El que aparece en los créditos como director es Viktor Fleming, pero lo cierto es que no terminó de rodar la película. Y no lo hizo porque se fue a rodar otra película mítica, lo que el viento se llevó, así que la película la terminó de rodar King Vidor.
Hablemos ahora de los protagonistas. Como sabes, el papel de Dorothy lo hizo Judy Garland. Judy por aquel entonces ya tenía 16 años y tenía que simular ser una niña de 12 años, cosa que le trajo muchos problemas, disgustos y sufrimientos. Para ocultar el pecho de la actriz la obligaron a llevar un corsé muy incómodo. Además, la obligaron a seguir una dieta basada en sopa y cigarrillos.
Y no solo eso, ya que según se cuenta, le daban estupefacientes durante el rodaje para que estuviera más eufórica y para que aguantase el largo rodaje. Al mismo tiempo le suministraban somníferos para poder dormir después de tantos estimulantes. La controlaban hasta tal punto que tenía un entrenador que la obligaba a practicar deporte a además de las extenuantes horas de rodaje. Todo ello porque el estudio consideraba que estaba gorda, cuando en realidad lo que pasaba es que no era una chica de 12 años. Pero no fue lo único que tuvo que sufrir Judy Garland.
También sufrió acoso sexual por parte de varias personas del equipo y humillaciones durante la grabación. Por ejemplo, uno de los productores la llamaba mi pequeña jorobada o Víctor Fleming, el director, le pegaba en la cara cuando se reía o fallaba en alguna escena. Consecuencias terminó siendo adicta a los fármacos y tenía unas enormes inseguridades debido a las humillaciones recibidas. Otros miembros del elenco también tuvieron que sufrir en este rodaje. Empecemos por el hombre de hojalata.
Resulta que en un principio el actor que empezó a rodar la película fue Buddy Epstein, pero en el rodaje empezó a sentir picores, falta de aire y calambres. Resultó que el polvo de aluminio que se utilizaba en su maquillaje le provocó una intoxicación que lo llevó al hospital. Fue sustituido por otro actor, Jack Haley. Con este actor no usaron el mismo maquillaje, evidentemente lo maquillaron con una pasta plateada para evitar riesgos. La actriz que interpretaba a la bruja mala del oeste, Margaret Hamilton, también tuvo una serie de percances derivados del maquillaje.
Por un lado, no pudo quitarse el maquillaje verde y tuvo que vivir con la piel de ese color durante una semana después de terminar la grabación. Pero le pasó algo más grave. Resulta que esa pintura verde era altamente inflamable y había una escena en la que la actriz terminaba rodeada de llamas. Durante la grabación, ella podía escaparse por una trampilla, pero se quedó atascada, las llamas le llegaron a la cara y terminó con quemaduras e ingresaron al hospital durante seis semanas. Como te podrás imaginar, desde ese momento se negó a rodar ninguna escena de riesgo, por lo que contrataron una doble.
Esa doble también sufrió varios accidentes durante el rodaje. Tenía que grabar una escena donde salía volando en una escoba mientras echaba humo. Pues bien, este sistema falló y terminó sufriendo un grave accidente. También sufrió un corte en la pierna y sufrió heridas cuando un miembro del equipo se cayó sobre ella. Vamos, que en ese rodaje tenían que tener un seguro muy bueno porque era difícil que pasaran más accidentes.
Otro de los actores que también sufrió un accidente fue el perro que interpretaba a Totó, que se rompió una pata cuando lo pisaron por accidente. Se dice además que el rodaje con este perro fue insoportable, ya que no estaba amaestrado y hacía lo que le daba la gana durante el rodaje. Pero hubo otros problemas que eran derivados del rodaje en sí. Hablábamos antes de los problemas que supuso esto del Technicolor. Esta técnica implicaba tener mucha luz concentrada en el plató, por lo que las temperaturas que alcanzaban eran altísimas, de más de 40 grados.
Esta cantidad de luz supuso unos gastos en electricidad que fueron una locura. Según cuenta la productora, supuso más de $250000 de la época, lo que equivale a unos 5,5 millones actuales. La mayoría de los actores necesitaban muchas horas de maquillaje, por lo que tenían que estar en rodaje sobre las 4:00 a.m. y tenían unas jornadas larguísimas. Solían rodar hasta las 8:00 p.m.
imagínate ese rodaje con esos trajes y esos maquillajes a más de 40 grados. Era un auténtico infierno. Para que te hagas una idea del sufrimiento que tenían que pasar los actores, Bert Lahr, que hacía del león cobarde, llevaba un traje hecho de piel de león real que pesaba 40 kg. De hecho, la mayoría de los actores, debido a estos trajes y al maquillaje, no podían comer nada durante la jornada de trabajo y solo tomaban líquidos. Mención aparte merecen los actores encargados de interpretar a los Munchkins y los Winkies.
Circularon rumores de que se pasaron borrachos todo el rodaje y sus modales, digámoslo de manera suave, dejaron mucho que desear. Parece ser que se dedicaron a acosar sexualmente a todo el mundo y especialmente a la actriz protagonista. Es cierto que luego se dijo que gran parte de lo que se contó fue una exageración de la época, que en realidad sí que pasó, pero fueron unos casos aislados. Lo que es cierto es que la película en su estreno tuvo muy malas críticas, aunque fue bastante taquillera. Pero el año de lanzamiento, 1939, no fue bueno para la película.
Debido a la guerra en Europa y a la gran cantidad de estrenos ese año, la película terminó en números rojos. Tuvieron que pasar bastantes años para que se terminara convirtiendo en la película de culto que es o en día. Sin duda fue un infierno para todos, pero marcó de por vida a Judy Garland, que como dijimos, se volvió adicta por culpa de este rodaje. Creo que nos podemos imaginar que cuando terminó aquel rodaje seguro que pensó aquello que se dice en la película de no hay lugar como el hogar. Hasta aquí el episodio de hoy.
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