This transcript has been generated automatically.
Hoy hablamos Episodio 2042 el cuidado de la piel Bienvenido a hoy hablamos, el podcast para aprender español cada día. Este podcast cuenta con un catálogo de más de 2000 episodios. Te recomiendo hacerte suscriptor premium para acceder al catálogo completo. Tienes más información en hoyablamos. Com.
¿Hola oyente, qué tal? El magnífico escritor argentino Jorge Luis Borges la piel es el espejo de nuestra alma. Y de ese espejo que es la piel y de su cuidado es de lo que vamos a hablar en el episodio de hoy. Hoy hablamos del cuidado de la piel. En ciclismo hay una expresión que es ir a rueda, y seguro que lo has visto en algún grupo de ciclistas.
Cuando va un grupo de ciclistas, uno se pone delante y todos los demás detrás, y se van turnando en ese puesto delantero. Esto se hace para que los que van detrás ahorren energía. Te lo explico. Los ciclistas en carretera sufren con el viento y luchar contra él merma las energías y desgasta mucho. Por eso uno se pone delante, se enfrenta al viento y es el que tiene mayor desgaste.
El viento frontal se dispersa por los laterales creando una zona de bajas presiones y de vacío detrás de él, y así los que van detrás pueden ahorrar energía. Normalmente en carreras se hace para proteger al líder del equipo, para que cuando tenga que atacar llegue con todas las fuerzas posibles. Y claro, el que va adelante, que ha hecho todo el trabajo sucio, no se lleva el reconocimiento, pero es el que ha frenado el viento, el que se ha llevado los golpes, el que con su trabajo y su exposición ha contribuido al éxito de sus compañeros. Y empiezo con esta metáfora porque ese ciclista es como nuestra piel, siempre en primera línea, enfrentándose al viento, al sol, al frío, al calor. Protege al resto del cuerpo, pero a menudo nos olvidamos de ella.
¿Cuidamos los órganos internos, vigilamos la salud del corazón o los pulmones, pero y la piel? Es nuestro órgano más extenso y visible y y sin embargo, muchas veces no le prestamos atención. ¿Lo primero que nos vamos a preguntar por qué es tan importante cuidar la piel? La primera cosa a tener en cuenta es que la piel es la primera barrera protectora con la que cuenta nuestro cuerpo. Esa barrera nos protege de la radiación solar, las bacterias, la contaminación, los productos químicos o las temperaturas extremas.
Pero además, la piel es la encargada de proporcionar una correcta percepción del tacto, de la temperatura, del dolor o de la presión. Otra función de la piel es ayudarnos a mantener el equilibrio de agua en el cuerpo. Y no solo eso, la piel también habla por nosotros. Cuando algo no va bien por dentro, a veces se manifiesta por fuera. Una erupción, una una palidez repentina, un color amarillento, una piel apagada pueden ser señales de problemas internos.
Además, nos ayuda a expresar nuestras emociones incluso aunque no queramos. Nos ruborizamos cuando tenemos vergüenza, se nos pone la piel de gallina con la emoción o el miedo, sudamos debido a los nervios. Todo eso y más hace nuestra piel, así que creo que no solo debemos estar profundamente agradecidos, sino que debemos cuidarla como se merece. ¿Cuáles son los cuidados básicos que debemos darle a nuestra piel? Uno de los hábitos más importantes es protegerla del sol.
Todos hemos visto a personas que se exponen al sol sin ningún tipo de protección y terminan con la piel arrugada como una pasa. Pero no es solo una cuestión estética, sino que exponer la piel al sol en exceso puede llevar a padecer cáncer de piel. Así que lo primero es protegerla del sol. Proteger la piel del sol incluye tanto no exponerse al sol a las horas centrales del día, que es cuando hay más radiación solar, como usar protección solar diariamente. Nuestros hábitos influyen en nuestra piel y hay que evitar fumar y beber.
¿Qué le pasa a nuestra piel cuando fumamos? Pues que se forman arrugas, además de que disminuye el flujo sanguíneo de la piel, reduce el oxígeno y los nutrientes necesarios para que la piel luzca de manera saludable. Otra cosa que elimina es el colágeno y la elastina, es decir, que fumar hace que la piel sufra. Por otro lado, la bebida en exceso hace que se deshidrate la piel y provoca hinchazón y enrojecimiento. ¿Sabes eso que se dice que cuando un día bebes mucho alcohol debes beber mucha agua para rehidratarte?
Pues bien, esa falta de hidratación se nota también en la piel. Y no pasa nada si bebes un día, pero si bebes de manera habitual eso se nota en la piel, que al perder hidratación se arruga, pierde elasticidad y está menos tersa. ¿No has escuchado a las modelos que siempre dicen que su truco de belleza es verd beber mucha agua y dormir? Bueno, seguramente también influyen otras cosas para esas bellezas, como la genética, pero sí que es importante para una buena salud de la piel la hidratación y reducir el estrés. Aunque no te lo creas, el estrés es una de las principales causas del envejecimiento prematuro de la piel, ya que provoca arrugas y se vuelve más sensible.
Seguro que te ha pasado que en un momento de mucho estrés o nervios has notado que te salían más granos. Y es que el estrés, al provocar más sensibilidad en la piel, se manifiesta en forma de acné, rojeces u otros problemas cutáneos que no favorecen la salud de la piel. Es crucial para cuidar nuestra piel dormir las horas suficientes, ya que es en esas horas de sueño cuando las células se regeneran. Vamos ahora a hablar de la rutina perfecta para el cuidado de nuestra piel. Yo la verdad es algo que no hago.
Sé que debería hacerlo pero bueno, ya sabes cómo dicen consejos vendo pero para mí no tengo. Sin embargo, Rebeca, mi pareja, es muy constante y concienzuda con su rutina de cuidado de la piel. Todos los días dedica unos minutos por la mañana y por la noche a ponerse sus cremas y productos para tener una piel tersa y bonita. Y yo creo que le funciona. Y si no creyese, pues no se lo diría para que no se ponga triste porque le dedica bastante tiempo.
Bien, pues podríamos decir que una rutina diaria básica de cuidado de la piel gira en torno a tres pilares limpiar, hidratar y proteger. ¿Parece sencillo, verdad? Pero la clave está en hacerlo bien y y con los productos adecuados para tu tipo de piel. Porque si usas algo que no le va bien a tu piel, aunque esté de moda o lo recomienden en redes sociales, en lugar de mejorarla puedes irritarla, resecarla o provocar brotes de acné. Empezamos por la limpieza.
Es el primer paso imprescindible. Limpiar la piel por la mañana y por la noche ayuda a eliminar las impurezas, el sudor, el exceso de grasa, la suciedad acumulada durante el día y las células muertas. Pero atención, no vale cualquier producto. No es lo mismo tener una piel grasa que una piel seca o sensible. Para pieles grasas o con tendencia al acné se suelen usar geles limpiadores espumosos o con ingredientes como ácido salicílico que ayudan a controlar el exceso de sebo o grasa.
Para pieles secas o sensibles, en cambio, se recomiendan limpiadores faciales con fórmulas suaves, sin fragancias ni alcohol, que respeten la barrera natural de la piel. Y en todos los casos es importante evitar el agua muy caliente que puede resecar o irritar. Después de limpiar llega el turno de hidratar. ¿Aunque tengas la piel grasa necesitas hidratarla porque? Porque la hidratación no es lo mismo que la producción de grasa.
Una piel bien hidratada es una piel más elástica, más luminosa y con una barrera protectora más fuerte. Para este paso hay una gran variedad de productos según las necesidades. Por ejemplo, si buscas un extra de hidratación sin sensación pesada puedes optar por sérums con ácido hialurónico, que es un ingrediente capaz de atraer y retener agua en la piel. Para pieles secas funcionan bien las cremas más densas o con ceramidas que refuerzan la barrera cutánea. Y para pieles grasas lo mejor son hidratantes ligeras tipo gel o loción que no obstruyen los poros.
Una vez hidratada viene un paso que, si solo pudieras hacer uno, debería ser proteger la piel del sol. El protector solar no es solo para la playa o el verano, es para todos los días, incluso cuando está nublado o estás en casa, porque los rayos ultravioleta siguen llegando a tu piel. Cuando hay nubes o aunque estés en casa, puedes salir al jardín o recibir radiación solar a través de una ventana. Y si ya tienes esta base cubierta y quieres ir un paso más allá, hay otros ingredientes que pueden aportar beneficios extra siempre que los uses con conocimiento y según tu tipo de piel. Por ejemplo, la vitamina C, que es un potente antioxidante, ayuda a unificar el tono, dar luminosidad y combatir los daños causados por el sol o la contaminación.
Se suele aplicar por la mañana, antes de la crema hidratante y del protector solar. Por la noche, muchos expertos recomiendan el uso de retinol o sus variantes más suaves, como el retinal. El retinol estimula la remoción celular y la producción de colágeno, lo que ayuda a reducir arrugas, mejorar la textura y tratar manchas. Eso sí, hay que empezar poco a poco y usarlo con precaución, ya que puede irritar si no se usa correctamente o si tu piel no está acostumbrada. Además, el retinol en exceso puede ser peligroso para tu piel y para tu salud porque es vitamina A y tu cuerpo la absorbe a través de la piel y esa vitamina en exceso puede provocar problemas de salud.
Tampoco puede aplicarse durante el embarazo, por eso hay que informarse muy bien sobre cómo usar este producto, cuál es la concentración de productos segura y en qué casos no se debe usar. Para resumir este episodio, no necesitas una rutina de 10 pasos ni una estantería llena de productos. Tampoco necesitas cremas carísimas. Lo importante es ver los ingredientes de las cremas y productos e informarse de la mano de expertos. Y ese no soy yo, claro, hay bastantes expertos por ahí.
Rebeca suele ver vídeos de una youtuber española llamada Ratolina y sus vídeos están muy bien. Yo también he visto algún vídeo de esta chica y aunque el cuidado de la piel y el tema de la belleza a mí no me interesa en absoluto, tengo que decir que esa youtuber Ratolina es muy buena y muy carismática. Hasta yo me engancho a veces algún vídeo que está viendo Rebeca y eso que no me interesa. Pues eso, te recomiendo ver sus vídeos si te gusta esto de la cosmética, la belleza, el maquillaje y todo esto. En definitiva, hay que prestar atención a la piel y cuidarla sin obsesionarse ni volverse loco con este tema.
Por supuesto que a veces los temas relacionados con belleza pueden conducir a obsesiones que no son buenas. Voy a terminar este episodio con una reflexión que me dijo un día mi madre. Me dijo algo así. No sé si estas cremas funcionan, pero yo pienso así. Si tengo unos buenos zapatos, les voy a echar cremas y productos para cuidarlos.
Pues también voy a echarle crema y productos a mi piel para cuidarla como si fuera unos buenos zapatos. Hasta aquí el episodio de hoy y ya sabes, si te gusta este podcast y el trabajo diario que realizamos, tu colaboración sería de gran ayuda. Para colaborar con este podcast puedes hacerte suscriptor premium. Los suscriptores premium pueden escuchar el catálogo completo del podcast con todos los episodios publicados desde 2017. Hazte suscriptor premium en.