This transcript has been generated automatically.
Hoy hablamos Episodio 2040 tu primer trabajo Bienvenido a hoy hablamos, el podcast diario para aprender español. Como siempre, hoy publicamos un episodio público y gratuito y otro episodio exclusivo para los suscriptores premium. En el podcast premium Rebello hablamos sobre el trabajo en España. Charlaremos sobre salarios, condiciones laborales y cosas así. Puedes escuchar este episodio si te haces suscriptor premium en Hoyhablamos.
Com. Ahora, en este episodio del podcast diario, Paco y yo hablamos sobre nuestras primeras experiencias laborales. Vamos con el episodio. ¿Hola, Paco, qué tal?
Buenos días, queridos oyentes. Pues uff, madre mía, hoy estoy un poco cansado. Estoy reventado.
No, no, es que estoy ya aquí trabajando desde la mañana hasta por la noche. 1 es que no da abasto.
Bueno, Paco, qué exagerado. Ni que fuera tan duro tu trabajo. Uy, profesor de español, grabar conmigo unos unos podcasts, charlar aquí de algunos temas.
Cómo nos gusta quejarnos. ¿Te das cuenta? Ni que estuviéramos aquí, no sé, trabajando en una mina.
Bueno, Roi, no, no estoy cansado, estoy bien. Sólo era una forma de empezar. Ya sabes que me gusta empezar diciendo algunas tonterías de vez en cuando y esta es una de ellas estoy bien, he dormido bien y estoy fresco como una lechuga.
Pero bueno, sí que es cierto que muchas veces cuando hablamos del trabajo y tal, lo primero que pensamos buf, estoy cansado porque he tenido que trabajar mucho, estoy cansado porque esta semana ha sido dura. O incluso ya te cansas antes de trabajar. Por ejemplo, es domingo, piensas en el lunes y ya como que te cansas porque dices uff, voy a tener que trabajar mucho mañana.
Fíjate que cuando hablas con la gente, bueno, tanto nosotros como ellos utilizamos mucho esa estoy cansado. No sé si es el estado natural de los adultos o qué pasa, pero es un adjetivo que se repite constantemente.
A ver, es que a veces tenemos muchas responsabilidades el trabajo, la casa, los hijos, los que tienen hijos, las plantas, Paco, que hay que regarlas. Yo por eso tengo plantas de plástico. No hay que regar el plástico. Pero bueno, hay que tener cuidado porque el otro día tenía un mechero, lo acerqué y se me murió la planta de plástico ardió. Claro, tenía un mechero, que es una cosa que hace fuego, y le acerqué mucho a la planta y ardió.
Y claro, me puse muy triste, Paco, porque vi la planta de plástico toda quemada y pens ni siquiera soy capaz de mantener viva, entre comillas, una planta de plástico.
Bueno, Roi, te recomiendo no sé qué te recomiendo que reflexiones sobre tu vida. ¿Primero, qué haces acercando un mechero a una planta?
Porque pensé que tenía frío, hacía frío ese día. Entonces vi ahí la planta y pensé a ver si va a tener frío y voy a acercarle un mecherito para que esté calentita.
Vale, Roe, pues te recomiendo que para que no incendies la casa con las plantas de plástico, te compres algunos cactus, porque los cactus necesitan cuidados y oye, son bonitos.
Vale, bueno, pues te tomo la palabra, Paco. Me parece una buena idea, aunque creo que he tenido un cactus alguna vez y lo regué demasiado. Lo veía ahí y pensaba voy a regarlo un poquito, voy a echarle un poquito de agua para que esté contento. Y bueno, después de unas semanas no estaba muy contento ese cactus.
Bueno, pues como hablamos de trabajos hoy ya sabemos que tú no puedes tener un futuro de jardinero en general, de cuidador, ni de cuidador de plantas, animales, ni quizás de niños.
Pues seguramente, al menos de jardinero lo veo complicado. Tendría que aprender mucho. Lo bueno es que nunca me he interesado por la jardinería, entonces tengo mucho que aprender. ¿Puedo leerme unos libros, preguntarle al chat GPT no?
Ya que me dices eso, quiero comentarte que tengo algunos amigos y conocidos, Roi, que están empezándose a interesar ahora por la jardinería. ¿Entonces con 20 años, no, con 25 no? Y ahora ya con los 30, 30 y pico años ya se empiezan o nos empezamos a interesar por la jardinería.
Pues yo lo veo muy normal. Al final con 30 años te viene la crisis de los 30, sientes que tu vida se marchita. Este verbo lo usamos para hablar de las flores cuando se mueren. Entonces tu vida se marchita como una flor, Paco, como una rosa sin agua.
Entonces estás ahí con 30, 35, todo agobiado, triste y bueno, pues de forma metafórica cuidas plantas y en esa planta te ves reflejado, Paco.
Estás muy profundo, muy pensativo, muy reflexivo y pocas bromas con eso. La gente siempre comenta cosas de la crisis de los 40, pero es otro tema este, el de la crisis de los 30. Además nosotros que estamos en esta época. Pero un día podemos hablar de eso, que el otro día estuve leyendo algunas cositas y me interesó mucho ese tema.
Venga, pues anotamos ese tema. A ver, la excusa es quejarse. La crisis de los 20, de los 30, el estrés de los jóvenes por el futuro, el estrés de los jubilados porque se jubilan y no saben qué van a hacer con su vida. Da igual la etapa de tu vida, siempre puedes buscar excusas para decir que puede haber crisis o problemas.
Nos gusta quejarnos, nos gusta quejarnos, nos gusta quejarnos. Las crisis o estoy cansado por el trabajo. Parece que es el estado natural del hombre.
Parece que sí. Pero bueno, vamos al tema de hoy, Paco, porque nos estamos desviando mucho en esta introducción.
Hoy queremos hablar de tu primer trabajo, de nuestro primer trabajo, de esa primera experiencia laboral tan bonita o tan terrible en muchos casos. Y vamos a ver un poquito de esto, de nuestra experiencia y también en general sobre este tema. ¿Y para comenzar, Paco, quería preguntarte tú cuál crees que es el primer trabajo más típico de los jóvenes en España?
¿El más habitual, el que suelen hacer los jóvenes más habitualmente? Roi me imagino que dependiente o camarero.
Me cuadra. ¿O sea, tenemos un montón de bares, restaurantes, 1 joven que quizá quiere trabajar en verano, por ejemplo, para ganarse un un dinero extra, no va a trabajar de presidente de Coca Cola, no? Todavía no estamos tan mal como para que ponga a un chaval sin experiencia ahí. ¿Pero dónde va a trabajar? Pues de camarero, de dependiente, en una tienda de ropa.
Porque en las tiendas de ropa en verano son las rebajas y hay más trabajo. Entonces contratan a gente durante verano o durante Navidad. Y como coincide con las vacaciones, es una buena época para trabajar si eres joven y estás estudiando, por ejemplo.
Sí. Y bueno, iba a decir que son trabajos fáciles, trabajos que no requieren mucha preparación académica y a priori no parecen tan complicados.
Pero estoy pensando ahora en todo lo contrario. Son trabajos difíciles. Por ejemplo, ser camarero en España, con la cantidad de clientes que algunas veces tiene un bar o un restaurante, el estrés, las prisas. No sé si tú y yo ya hemos hablado de estos temas.
Hemos hablado de tanto paco, que ya no sé qué hablamos, qué no hablamos, pero seguro que hablamos alguna vez del trabajo de camarero. Yo estoy de acuerdo contigo. O sea, sí que es un trabajo fácil en el sentido de que con aprender un poquito ya sabes lo que tienes que hacer. No necesitas ir a la universidad o formarte mucho para ser camarero. Pero el trabajo en sí no es tan fácil como parece, porque es lo que dices tú, es estresante, trabajas mucho, requiere bastante esfuerzo.
Yo aquí estoy sentado en mi silla, cómodamente, bebiendo agua, echándome aquí unas risas con Paco y muy estresado no se me ve. Y a ti tampoco, Paco Desde luego.
Roi, creo que sería más difícil o más estresante para nosotros trabajar de camareros o de dependientes. Pero tú imagínate a un dependiente que que trabaje en una tienda de ropa. También puedes estar estresado porque, por ejemplo, no sé, no tienes la talla que te pide un cliente.
Sí, o a veces, yo cuando voy a comprar ropa, una vez al año, porque no voy muy frecuentemente, la verdad, pero cuando voy a comprar ropa, si coincide que es un día que hay mucha gente en la tienda, puedes ver cómo las personas que trabajan en caja muchas veces están como no sé si agobiadas, pero tienen que hacerlo todo muy rápido. ¿Y yo veo eso, me imagino a mí trabajando ahí y pienso tendría que cerrar la tienda o me despedirían a la semana? Porque yo para algunas cosas soy bueno, pero para pensar rápido, sobre todo cuando estoy haciendo cosas con las manos, no se me da muy bien. ¿No soy muy ágil, sabes?
Por ejemplo, Rebeca siempre se queja porque cuando lavo los platos voy muy lento. ¿Ella dice que cuando lavo los platos se ensucian más platos de los que lavo por minuto, sabes? No sé qué pasa, pero yo estoy lavando y digo Joder, hay más platos sucios que cuando empecé y al final.
Lavo los platos, estoy ahí tranquilamente fregando bien el plato. Quizás que soy muy perfeccionista, busco la excelencia cuando lavo los platos.
Bueno, Paco, pues ya que hablamos de trabajos así de jóvenes, trabajos temporales, tenías un dato por ahí sobre EE.UU. que cuando me lo comentaste antes fuera de micro me pareció muy interesante.
Y es que en EE.UU. leí una vez que el 12 % de la población ha trabajado en el McDonald's, es decir, uno de cada ocho personas. Es un dato impresionante.
Sí, por supuesto. Sabemos que hay muchos McDonald's en EE.UU. y en todo el mundo, pero igualmente uno de cada ocho estadounidenses ha trabajado en el McDonald's.
La verdad, cuando leí este dato me sorprendió, porque es lo que dices tú, hay muchos establecimientos de este tipo, pero es eso, un 12. %.
Qué barbaridad. ¿Ves en España yo creo que no hay tanta cómo decirlo? Cultura o hábito de trabajo juvenil. Por eso creo que no podemos sacar un dato como este en España. O sea, sí que hay jóvenes que trabajan y tal, pero no se ven tantos como en otros países, como en EE.UU.
o como otros países de Europa. No tenemos que irnos tan lejos. Tengo un amigo que vive en Países Bajos y él me dice que en Países Bajos es habitual ver a chavalitos de 14, 15, 16 años trabajando en restaurantes, en supermercados. Y en España es muy raro ver eso. Puedes ver alguno, algún chaval de 16 años trabajando, pero es poco común.
Es decir, has dicho 14 años, Roi. ¿Qué pasa en los Países Bajos? A ver, eso ya es un poco llamativo.
¿Estás seguro? Porque en España, por ejemplo, la edad mínima para trabajar son 16 años. Y el sí, sí, 14 años. Y creo que me comentó que incluso con 13 años, en Países Bajos, al menos en ciertos casos, con ciertas condiciones, un niño podría trabajar. Pero claro, con muchas limitaciones.
No es que cojan a los niños y los pongan a trabajar ahí en trabajos duros o industriales. Hay muchos límites a las horas que pueden trabajar, los tipos de trabajos que pueden hacer. Entonces sí, y él me decía que lo hacen para que los niños sepan lo que es la responsabilidad. Y de una forma controlada, claro. No están trabajando 8 h al día, los cinco días de la semana.
A ver, que es verdad que es un dato llamativo que haya niños, niños, adolescentes, adolescentes de 13 años que ya estén trabajando, pero si es algo voluntario y nadie te obliga, puede también una buena manera de ver cómo es la vida, de ver que el dinero cuesta trabajo, de ganar, y que oye, pues una forma de madurar más rápidamente.
Entonces yo ahora, como ya soy adulto y ya no tengo que sufrir eso, pues pensaré sí, mi hijo que se ponga a trabajar un poquito con 13 años, que aprenda a tener una responsabilidad, que aprenda lo dura que puede ser la vida por momentos. Mientras tanto, yo me voy de vacaciones y me tomo unos mojitos en el resorte.
Bueno, pues tengo que decir que con 13 años yo también tuve un pequeñito trabajo. Sí, sí, sí, desde luego.
No me digas. No, es que tuve que montar un castillo de Lego. Eso no es trabajo, eso es ocio.
Un compañero de mi padre necesitaba algunos trabajadores jóvenes a los que pudiera pagar poco dinero. Y bueno, estuve allí trabajando unas semanitas. Lo que pasa es que fue bastante duro, porque si no recuerdo mal, fue durante el verano, hacía muchísimo calor y el salario era horrible, horrible. ¿No lo Cuántos pagó por el trabajo? Pues no hubo contrato, por supuesto.
Todo fue en negro. Pues nos pagó como unos €150 por, no sé, tres semanas o algo así.
Ostras, vale. Yo ya me estaba emocionando. ¿€150 ya pensaba por día o por semana?
Lo peor de todo es que bueno, lo peor de todo, evidentemente es ese trabajo tan mal remunerado y la dureza del trabajo y todo esto. ¿Pero también sabes qué pasó, Roi? Cuando gané ese dinero.
Cuando me pagó esos €50, lo que hice fue gastármelo inmediatamente en cartas Magic. No sé si sabes qué son esas cartas Magic.
Sí, las típicas cartas, bueno, no recuerdo que tenían, pero personajes del mundo Magic.
Era un juego de sí, era un juego de rol. Había diferentes bueno, ni siquiera sé describirlo, pero bueno, un juego de rol en el que tienes que ganar a tu rival, y si tienes mejores cartas, pues vas a tener más posibilidades de ganar a tu rival.
Bueno, Paco, que no me interesa el Magic ese, a mí me interesa lo de las patatas. ¿Entonces, €150, cuánto calculas que te pagó la hora? Porque es más fácil verlo en hora. ¿Cuánto ganaste la hora, más o menos?
Y claro, ahora los oyentes pensarán es que España estaba muy mal cuando Paco era joven. España era un país muy pobre, sufríamos mucho. Bueno, eso era la época de nuestros abuelos.
Cuando nuestros abuelos tenían 13 años, sí que se ganaba €1 la hora o €2 la hora. Pero Paco tuvo ahí una experiencia de la posguerra digna. De la posguerra.
De la posguerra. Y en una época de no sé, muy buena en España, porque más o menos hace 20 años, en el 2005, creo que había una época esplendorosa en lo económico.
Sí, sí. O sea que aún encima yo pensaba que a lo mejor fue después de la crisis, pero no, antes de la crisis. Guau. Ese hombre me parece que era un poco sinvergüenza. ¿Paco, tú qué opinas?
Totalmente, Roi, un sinvergüenza. Pero al fin y al cabo fue un aprendizaje para mí. Y el aprendizaje fue lo difícil que es ganar dinero y lo fácil que es tirarlo a la basura. Porque después de ganar esos €150 me los gasté en trozos de papel, en unas cartas.
Y piensa la ironía, Paco, si esas cartas fueron fabricadas con papel reciclado, quizá las fabricaron con mondas de patatas. Entonces tú estuviste tres semanas recogiendo patatas y luego gastaste todo ese dinero por unas mondas de patatas.
En el fondo si, Roi, prefiero no pensarlo porque me voy a poner un poco más triste. Así que si quieres, háblame de tu primer trabajo o de alguna cosa así, porque ya estoy aquí con las lágrimas a punto de salirme de los ojos.
Venga, pues te puedo hablar yo de mi experiencia. A ver, mi primer trabajo oficial, que probablemente conocen muchas personas, muchos oyentes se llevan años escuchándonos, es aquel trabajo del que he hablado en varias ocasiones, que en el 2016, si no recuerdo mal, trabajé en una consultoría de comunicación, y fue el primer trabajo que tuve después de la universidad. Yo estudié la carrera y luego empecé en este trabajo. Y digo que algunos oyentes lo recordarán porque es la típica historia que cuento, que era un trabajo muy aburrido. Yo estaba muy triste durante esa época, se me hizo muy duro.
No, fueron años, pero para mí fueron como seis años. Paco y porque era muy aburrido. Ni siquiera era duro el trabajo no era duro, no era difícil ni nada, pero era tan aburrido que los minutos eran como horas.
En ese trabajo estabas mirando el reloj todo el tiempo. Y eso es lo peor, cuando te pones a mirar el reloj, las horas te hacen largas.
Pero bueno, aunque este fue mi primer trabajo oficial, luego lo estaba pensando y en realidad no fue mi primer trabajo. Paco porque yo antes de trabajar en esto con un amigo, con Rey, tuve un pequeño negocio de importación de productos de China, de importación de productos de electrónica, principalmente. Y esto fue en el 2014, más o menos, si no recuerdo mal, entre el 2013 y el 2015 o algo así, más o menos.
Y realmente ese fue mi primer trabajo. Lo que pasa es que en ese momento yo no lo veía como un trabajo, porque me lo pasaba bien. Paco era entretenido, era comprar productos de China, nos llegaban a casa. Claro. Comprábamos 100 o 200 unidades de baterías para móviles, de fundas para iPhone, como productos de electrónica, los poníamos a la venta en ebay, los vendíamos, teníamos que ir a correos a enviarlo.
Sí, durante unos meses ganábamos algo. A ver, no ganábamos mucho, no recuerdo cuánto ganábamos, porque la contabilidad de nuestro negocio no pasaba una auditoría de Deloitte.
Bueno, no me refería a eso. Sí que lo hicimos legal. Bueno, durante los primeros dos, tres meses no, pero cuando empezamos a ganar un poquito dinero, sí que era legal. Más bien me refería a que no hacíamos muy bien las cuentas, entonces no sabría exactamente cuánto dinero ganamos, porque bueno, entraba dinero, salía dinero, era como bueno, venga, vamos a comprar esto, lo enviamos.
No era todo muy exacto. Pero bueno, imagínate que a lo mejor cada uno podíamos ganar €300 al mes. Trabajamos dos, 3 h al día. Entonces, para nosotros, en esa época éramos universitarios, era muy buen dinero. Y si lo comparo contigo, Paco, y tus patatas, yo era Rockefeller, por lo.
Menos, al final, por menos horas y desde tu ordenador €300 para un estudiante universitario es un dinero importante cuando no tienes que pagar alojamiento, no tienes que pagar comida, eso ya lo pagaban los padres.
Claro, claro. En ese contexto en el que nosotros vivíamos con nuestros padres y nuestros gastos eran salir de fiesta y poco más e ir a un viaje una vez al año. Entonces, en ese contexto el dinero estaba muy bien. Pero bueno, luego el negocio empezó a hacer aguas.
Empezó a hacer aguas porque algunos productos que compramos no funcionaron. Luego empezamos a ver que la rentabilidad no era tan buena como parecía porque al final no ganábamos tanto. Vendíamos una funda y ganábamos €0,30. Muchas fundas tienes que vender para vivir de eso.
A los dos años más o menos. También ten en cuenta que cuando tienes un negocio en España, tienes que pagar la cuota autónomos. Entonces cuando lo hicimos legal y empezaron a subir los costes, el IVA, el no sé qué, tenías que pagarle al gestor para que te hicieran los impuestos. Y al final hubo un momento en que ganábamos €500 entre los dos y teníamos €400 de gastos y decíamos para ganar €100 o €200 no estoy aquí trabajando.
Que no era mucho trabajo, pero bueno, ya no merecía la pena. Entonces, bueno, fracasó. También te digo que cometimos ciertos errores, eligiendo productos malos y tal, entonces si lo hubiéramos hecho de otra forma, quizá hubiera funcionado mejor.
Pero también te digo que quizás gracias a ese trabajo sembraste esa semilla para en el futuro tener otras ideas de negocio. ¿Porque ya con cuántos años tenías?
Sí, sí, sí. Y si haces esto que decía Steve Jobs en su famosa charla en Stanford, conectas los puntos.
Yo tuve esa experiencia y ahí descubrí un poco el mundo emprendedor. A ver, que era un negocio muy cutre, no era Silicon Valley, eso era comprar una funda por €1 y venderla por dos. Pero bueno, aún así te das cuenta de cómo funcionan ciertas cosas. Y luego tuve ese trabajo de la consultoría que fue muy aburrido, muy aburrido, muy aburrido. Y fue tan aburrido que a los seis meses lo dejé y buah, tengo que hacer algo más divertido y que me pueda dar ingresos.
Y en cierta forma, sin esas experiencias quizá no existiría. Hoy hablamos hoy en día porque justo cuando deje ese trabajo, tú y yo empezamos en enero del 2017 y yo había dejado el trabajo en diciembre. Entonces coinciden las fechas.
Por pequeños detalles muy tontos, la historia se desarrolla, la historia personal, los proyectos y hasta la historia de los países por pequeñas cosas que luego dices ostras, no sabía que eso tuviera tanta importancia en ese momento.
Totalmente. Roi, pues fíjate que hemos hablado aquí un ratito de nuestras tonterías y nos ha salido un episodio. Cómo es esto.
Sí, y más gratificante, porque recoger patatas, bueno, no sé si es gratificante o no, tú me dirás, Paco, pero no mucho.
No me daba cuenta, iba a coger alguna patata y por el otro lado estaba podrida. O cuando aparecía algún insecto debajo de la patata, eso no era tan gratificante.
Bueno, pues ese trabajo, por suerte, tenemos mucha suerte, sí que es muy gratificante. Entonces estamos muy contentos. Pues nada, Paco, hoy hemos hablado un poquito de nuestras primeras experiencias, nuestros primeros trabajos.
¿Hoy no me hablaste del trabajo de socorrista, porque fue uno de tus primeros trabajos también, no?
Y hay algunos más, Roi, de camarero unos cuantos días, o cuando empecé a ser maestro aquí en la ciudad, y otras cosas. Pero no sé, me he querido centrar en el tema de las patatas. Es un tema que me hace mucha gracia. Y fíjate, porque se cierra el círculo, ya que ahora mi plato favorito creo que es la tortilla de patatas.
Pues eso es bueno, Paco, porque a veces algunas personas que tienen un trabajo recogiendo patata o yo que sé, envasando latas de atún, pues luego le cogen asco al atún, porque como están todo el día con el atún, luego ya no quieren verlo en su vida personal, no quieren platos con atún. Pero tú no no le cogiste asco a las patatas también fueron tres semanas, no fueron tres años, no fueron Exacto.
Perfecto. Bueno, pues creo que podemos dejar aquí el episodio. Hemos hablado un poquito de nuestras primeras experiencias laborales. Y nada, Paco, cuídate mucho.