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¿Hoy hablamos Episodio 2036 cómo influye tu nombre en tu vida? Bienvenido a hoy hablamos, el podcast diario para aprender español. Como siempre, hoy publicamos un episodio público y gratuito y otro episodio exclusivo para los suscriptores premium. En el podcast premium, Rebe y yo hablamos sobre la lectura y los libros, aprovechando que celebramos el Día del Libro hace poco. Puedes escuchar este episodio y si te haces suscriptor premium, en hoyhablamos.
Com ahora, en este episodio del podcast diario, Paco y yo hablamos sobre la influencia que tu nombre puede ejercer en tu vida. Quizá conoces a un dentista que se llama Dennis o Denise. Pues hoy vamos a explicar este fenómeno mezclando algo de ciencia con casos anecdóticos. Vamos con el episodio. ¿Hola, Paco, qué tal?
Buenos días, Roi. Buenos días, queridos oyentes. Pues estoy bien, pero dudando, dudando sobre algunas cosas hoy, Roi.
¿Te vas a cambiar de nombre? Claro. Hoy vamos a hablar de la influencia del nombre. ¿Entonces, has reflexionado y te has dado cuenta que tu nombre no te va a hacer llegar lejos?
Entonces estoy pensando en algo más potente, algo más fuerte. Y estoy pensando en Héctor.
Héctor. Pensé que me ibas a decir algo como Rocky Schwarzenegger, que no es un nombre, pero bueno, yo qué sé. No sé si puedes ponerle ese nombre a tu hijo en España.
No sé si puedes cambiarte el nombre y ponerte ese, pero bueno, si pudieras. Son nombres que suenan así poderosos.
Claro, porque el nombre influye, como vamos a ver más tarde. Entonces, Paco no impresiona tanto, pero creo que Héctor sí. Lo mismo que Roi, aunque antes te he insultado y he dicho que tu nombre es un nombre de mascota, pero también impresiona.
Bueno, no sé si impresionar es el verbo más adecuado, porque tengo que admitir que cuando te conocí hace ya como 10 años, Roi, pensé que tu nombre era un nombre de perro.
Y efectivamente, esto no me lo toma mal, porque realmente sí que es un nombre de perro. Quizá no se usa tanto actualmente, pero sí que creo que ya he contado esta historia, que cuando mi madre eligió este nombre, una familiar le no, no lo llames así. Así se llama el perro de mi vecino.
Entonces, efectivamente, este nombre, que es gallego, es un nombre gallego de esta región de España. También es un nombre que supongo que viene de del Reino Unido, de Irlanda o de por ahí. Pero bueno, durante muchos años este nombre se le ponía más a los perros que a las personas. Ahora ya me he encontrado con algunos, Royce, ya no soy el único, pero hasta hace poco era de los pocos.
Porque podemos hablar, Roi, de si es o no importante tener un hombre guay, y creo que la respuesta es lógica. ¿Pero oye, qué piensas tú?
Hombre, yo creo que creo que el nombre sí que influye. Creo que es algo que te influye porque es tu nombre, es lo que vas a usar toda tu vida. ¿Y si tus padres te llaman Botella?
A ver, supongo que no pueden llamarte Botella porque hay normas para proteger a los niños, pero imagínate que te llaman Botella. En España sí que existe el apellido Botella. Es un apellido, no es muy frecuente, pero existe. Pero si te llaman Botella, no es un nombre que te va a beneficiar en el futuro, creo yo.
Hay algunos límites. Algunos límites. Por suerte parece que la ley protege a los menores, porque algunas veces a los padres se les va la cabeza y tienen algunas ideas de bombero. ¿Pero Roi, no sé, por ejemplo, con el ejemplo que me has dado de botella, puede influirte ese nombre de manera positiva? Porque quizás vas a ser, no sé, un empresario que monte una empresa de de bebidas alcohólicas.
Vale. ¿Puede ser que tu nombre Botella influya? ¿Bueno, insistimos en que este nombre creo que no existe en España, vale? Nos lo estamos inventando.
Pero imaginémonos que sí, que de repente existe este nombre Botella. Podría ser que te influyese. Y como tú escuchas, botella, botella es tu nombre. Cuando pienses en empezar una empresa, digas venga, voy a hacer una empresa de cerveza, o voy a hacer una empresa de vino, porque hay botellas de vino, botellas de cerveza. O voy a hacer una empresa de vidrio, de envases de vidrio, como las botellas de vidrio.
O voy a ser alcohólico. Sería otro posible futuro. Entonces no todos los futuros son buenos en esta historia.
Bueno, Roi, pues fíjate que ese nombre a priori tan absurdo podría darle al niño o a la niña muchas opciones laborales para el futuro.
Vale, Roi, pero hoy estamos aquí para hablar del determinismo nominativo. Y son dos palabras un poco difíciles de pronunciar.
Es que esto suena muy bien. Determinismo nominativo. Esto suena a una teoría súper avanzada científica.
Bueno, no vamos a usar este nombre tan complejo. Esto es la teoría de que nuestro nombre puede influir en las elecciones en nuestra vida, como en la profesión que elegimos, en la ciudad que vivimos o incluso en la pareja que elegimos. Luego veremos algunos datos, algunas anécdotas sobre esto y debatiremos sobre si realmente el nombre influye tanto o no.
Y Roi, aquí quiero comentar una cosita. Es que la idea de este episodio nos la dio Robin, y es un estudiante de Inglaterra, un estudiante de español, que, bueno, pues cuando estaba hablando con él le pregunté Oye, qué nombre tan guay.
Me imagino que de niño eras muy popular, porque Robin, Robin Hood, eras tú el chico que les robaba los bocadillos a los ricos para darles los bocadillos a los pobres. Pero no, no, creo que él no robaba bocadillos.
Vale, entonces él ahora es inspector de hacienda, porque Robin robaba a los ricos. Los inspectores de hacienda en principio intentan descubrir a personas que están evadiendo impuestos. ¿Entonces, a qué se dedica Robin, Paco?
Vale, Roi, pues creo que no es inspector de hacienda, es preparador físico, entrenador personal. Entonces quizás Robin les roba a sus clientes kilos, kilos de más, porque quizás están un poquito gorditos, entonces acuden a él y de esa manera, pues pierden kilos.
Bien, bien. Bueno, creo que Robin no cumple nuestra teoría del determinismo nominativo, pero bueno, le damos las gracias por darnos esta idea, porque vamos a hablar un poquito de estas cosas.
Ninguna sorpresa, por supuesto, no estamos descubriendo aquí nada del otro mundo, pero bueno, nos influye dónde nacemos, la educación que nos dan nuestros padres, el ambiente, amigos, escuela, y muchas otras cosas. Pero sorprendentemente, quizás también nos afecte en cierta medida nuestro nombre.
Este es el tema de hoy. Yo ya aviso que soy un poco escéptico sobre esta teoría porque no creo que influya tanto, pero bueno, hemos visto algunos estudios, algunas cositas que dan indicios. Aún así insistimos en que no va a ser algo que influya tanto.
Entonces, por ejemplo, una persona que se llame Esperanza, que es un nombre o era un nombre común en el pasado en España, una persona que se llame esperanza no puede estar nunca desesperanzada o triste, siempre tiene que mantener esa llama, esa ilusión, esa esperanza.
Podría ser, si nos creemos la teoría de que el nombre realmente influye en nosotros, esperanza va a ser una mujer que escuche muchas veces su nombre, esperanza, y esa palabra implica cosas positivas. O si te llamas felicidad, o incluso si te llamas luz, también es una palabra que tiene ciertas connotaciones positivas, excepto cuando te llega la factura. Cuando te llega la factura de la luz, ahí no estás tan contento, ahí.
Cuando te llega la factura de la luz. Entonces, sí, Roi, es posible que estos nombres pongan algo de presión a las personas que se llaman así, porque, oye, si una persona está llorando, esa mujer que se llama felicidad está llorando, alguien le va a no llores, no llores, que tienes que respetar tu nombre. Entonces, no sé, esa persona estará muy cansada de escuchar eso, de haber escuchado eso en su vida.
Sí, y podría dar pie a hacer ciertos chistes. ¿Si Esperanza llega un día a tu casa y dice que está desesperanzada, que no, que no sabe qué hacer y tal, pues tú le puedes tú no puedes estar desesperanzada, crees Esperanza?
Claro, y la pobrecita dirá Madre mía, me han dicho esto 500 veces en mi vida. Pero es el nombre que te acompaña desde que naces hasta que te mueres. Y no te va a abandonar esa pobre Esperanza. Va a tener que escuchar esa broma millones de veces.
¿Y qué crees que es mejor, Paco? Llamarte Esperanza, que tiene cosas positivas, pero a veces podrían hacer bromas para decirte que nunca puedes estar triste. O llamarte Dolores, que ahí ya es un nombre con mucha connotación negativa. A nadie le gustan los dolores.
Sí, o Angustias, aunque tampoco es un nombre muy común ahora, es más de personas mayores, hace muchas décadas.
Son nombres con una connotación un poquito más negativa que a ver, yo supongo que las personas que se llaman así no le dan ninguna importancia y no influirá tanto en su vida, pero bueno, puede ser que una ligera influencia, una pequeñita influencia puede ser que tenga, pero no tenemos estudios para afirmar esto en este caso. Sí que tenemos estudios para afirmar otras cosas, pero no podemos saber si una mujer que se llama Esperanza va a tener una actitud más positiva en la vida que una mujer que se llama Dolores. Pero bueno, igualmente estos son nombres ya un poco anticuados, diríamos. Son nombres que tienen personas de 60, 70,80 años, pero es muy raro hoy en día conocer a gente de 20 o 30 años con estos nombres.
Y es importante también, Roi, elegir el nombre antes del parto. Porque si no tienes muy claro qué nombre le vas a poner a tu hijo o a tu hija y finalmente tienes un parto muy difícil, muy duro, pues claro, voy a ponerle a mi hija angustias o voy a ponerle dolores.
Pero bueno, es verdad que hay que elegir el nombre cuando los padres estén tranquilos, relajados, que no haya emoción. Hay que elegir el nombre con mucha tranquilidad.
Porque si no, Paco, puede pasarte como a unos padres que el padre se apellidaba cuesta la madre mogollón. Mogollón en español significa mucho. ¿Vale? Entonces el padre cuesta la madre mogollón. Y el nombre supongo que lo hicieron cuando estaban viendo la factura de la luz, cuando estaban viendo la factura de la electricidad, una factura muy abultada, muy cara.
Entonces estaban angustiados, estaban molestos. Ay, qué cara es la luz. Qué cara es la luz. ¿Entonces, qué nombre le pusieron a su hija? Luz.
Luz. Y con los apellidos, como bien has explicado, entonces el nombre completo sería Luz cuesta mogollón. Luz cuesta mucho. Claro. Pobre chica.
Porque no sé si te acuerdas de ella, hace unos cuantos años hubo un programa con ella, una entrevista que le hicieron, y ella explicó que su nombre fue un poco doloroso para ella, porque le marcó. Le marcó, le influyó. Y muchos chicos se reían de ella.
Y luego, cuando ella usaba su nombre en cualquier otro ámbito es que parece de broma. Tú imagínate que recibes un currículum vitae, tú eres reclutador, trabajas en recursos humanos, y recibes un currículum con el nombre Luz Cuesta Mogollón. A ver qué graciosos mis compañeros haciendo esta broma. Y lo tiras a la basura. Esta mujer no encontró trabajo en su vida.
Pobrecita. Pobrecita. Sí. Me imagino que pocos reclutadores van a tomar en serio ese nombre. Y no sé, yo creo que me cambiaría el nombre en ese caso.
No nos hemos inventado ni el nombre ni la historia. Porque puede parecer una broma y tal, pero realmente esta mujer salió en las noticias, enseñó su documento de identidad. O sea, esto es real, es un nombre de verdad. Y bueno, tuvo mala suerte con los apellidos, que coincidieron de una forma que construyen una frase. Si fuera al revés, luz mogollón cuesta, no tendría tanta importancia, porque al alterar el orden ya no tiene tanta gracia.
Y de hecho, ahora hay algunos padres que hacen eso, que deciden poner el apellido de la mujer antes que el apellido del hombre.
Yo creo que en este caso lo hubiera hecho, hubiera sido una buena decisión. Pero bueno, ahora ya está.
Entonces, Paco, yo quería preguntarte estamos diciendo que el nombre puede influir, luego veremos los datos, que puede influir en la elección de tu profesión o en la ciudad en la que vives. Pero tú yo te llamo Paco, pero en realidad tú no te llamas Paco porque te llamas Francisco. Porque Paco es como llamamos a los Franciscos. ¿Entonces, qué nombre te influye a ti? Porque te llamo Paco, pero en realidad te llamas Francisco.
Y en realidad tienes dos nombres, porque te llamas Francisco Javier. ¿Entonces, cuál te influye? ¿Paco, Francisco o Javier?
Sí, Paco, ya. Sí que me gusta la forma corta Paco me gusta. Pero Francisco Javier es un nombre compuesto. Ya sabes que es bastante común en españ Juan Carlos, José, Antonio, María Isabel. Lo que pasa es que nunca me ha gustado mi nombre, Javier.
Un poquito más que Francisco, eso sí. Entonces, pues respondiendo a tu pregunta, me influye Paco. Si alguien me dice Francisco Javier, voy a ir y voy a darle un puñetazo en la boca porque me está insultando.
Bueno, bueno, bueno, bueno. Entonces, Paco, tú no tienes médico, porque cada vez que vas al médico y el médico Francisco Javier acuda a la consulta, tú le das un puñetazo.
Tengo que admitir que los únicos que me dicen Francisco Javier son mis padres. Y especialmente recuerdo que cuando era adolescente y me comportaba mal, especialmente cuando estaban enfadados, era cuando gritaban Francisco Javier, ven aquí. ¿Francisco Javier, qué has hecho? Especialmente en ese momento.
Es muy típico esto, las personas que usan un nombre distinto, o sea, no un nombre distinto, sino una forma distinta, como Francisco le decimos Paco, o José le decimos Pepe, que luego cuando se porta mal o algo así, su padre o su madre le llaman por el nombre original, dicen Francisco José.
¿Y luego qué pasa? Que tú puedes tener un poco de connotación negativa hacia tu nombre, porque cada vez que escuchas ese nombre te acuerdas de cuando tu madre te regañaba, o de cuando habías hecho algo malo y tenías consecuencias negativas. Entonces hay mucha negatividad hacia ese nombre. Bueno, tu nombre original, entre comillas.
Y también puedo añadir una pequeña historia, y es que cuando tenía nueve años, nueve o 10 años, nos mudamos desde Andalucía a Cataluña, a un pequeñito pueblo de 1000 o 1500 habitantes, no recuerdo. Entonces yo allí era el único chico de mi clase, o casi del instituto, que tenía un nombre castellano, porque el resto de compañeros tenían nombres catalanes, como Jordi, Mark, Sergi, Manel entonces nombres catalanes típicamente. Y recuerdo que durante un tiempo me dio un poquito de vergüenza llamarme Francisco Javier o Francisco, porque era como un nombre así, pues como te digo, castellano. Y yo quería pertenecer al grupo, era niño o era adolescente, y me sentía un poquito excluido porque era el único chico de clase que no tenía un nombre catalán. Entonces, fíjate cómo influye.
Hombre, tiene mucha lógica, porque tú al tener ese nombre distinto, en ese ambiente, en ese contexto, cada vez que la gente te preguntaba tu nombre, o bueno, pasaban lista en clase o lo que sea, y decían los nombres de las personas, eso te recordaba a que tú eras un extranjero, entre comillas. Obviamente no es que fueras extranjero, pero sí que eras una persona de fuera de Cataluña. Ese no era tu pueblo, no era tu ciudad, no era tu región ni siquiera. Además, en Cataluña mucha gente habla catalán, también hablan español, pero el idioma que usan frecuentemente es catalán.
Entonces te recordaba que tú no pertenecías a ese sitio todavía. Porque luego fuiste conociendo gente, supongo, pero al principio tu nombre marcaba todavía más la diferencia que había entre tú y el resto de chicos.
De superación, Paco. Van a hacer una película como la de 12 años de esclavitud de tu historia, porque está casi a la par. Yo creo que Martin Luther King en su discurso habló de ti, porque dijo es que este chico cómo sufrió.
Claro que sí. Claro que sí. Pero Roi, tú también puedes compartir tu trauma, porque tu nombre y apellido son un poco curiosos, vamos a decir.
Es que me estaba enfadando un poco contigo, Paco, cuando me contabas esta historia, dándome pena que si yo me llamaba Francisco y mis compañeros francés, entonces había mucha diferencia. Tú has visto mi apellido, Paco.
Yo le tengo cariño a mi apellido y lo llevo muy bien, y no lo cambiaría por nada.
Pero durante mi adolescencia, durante mi infancia, me dio ciertos problemas, generó ciertas burlas, generó cierta tensión en la clase. Yo me apellido Bolás, para quien no lo sepa. Supongo que la mayor parte de la gente lo sabe, pero yo soy Roi Bolás. Claro. Bolas con tilde en la A.
Siempre tengo que decir esto. Bolas con tilde en la A. De hecho, yo creo que ya piensan que me apellido Roi Bolás con tilde en la A en lugar de Roi Bolás. Porque muchas veces tengo que decir esto cuando estoy rellenando algún formulario en algún sitio oficial o lo que sea, para que pongan bien el apellido y digo contítenla. Porque si tú dices bolas sin tilde, es bolas.
Y bolas es una palabra que se entiende muy bien en cualquier idioma. Aunque no sepas español, si sabes inglés más o menos, dices bolas bols. Sí, sí, tiene diferentes significados, pero algunos no son muy positivos.
En el objeto con el que se juega fútbol, por ejemplo. Pero la mayoría de gente en España, al escuchar bolas, va a pensar en testículos. Las partes íntimas masculinas.
Exacto. La gente cuando se ríe no piensa en bolas de billar, no piensa en la bola de fútbol o en la bola de rugby.
Claro. A mí me molían a palos, Paco, en el instituto. Aquello era como la guerra. No estoy de broma.
Por supuesto que se hacían algunas bromas y tal, pero no se hacían tantas bromas como se podrían haber hecho, sinceramente. O sea, no tengo ningún trauma por ese apellido. Sí que había las típicas bromas y tal, pero ni tan mal. Ni siquiera tenía un mote. Fíjate tú qué suerte tuve, porque podrían haberme puesto un mote por mi apellido, pero no, no tenía un mote.
Y por suerte tus padres fueron más o menos buenos a la hora de ponerte un nombre. Porque si te hubieran puesto un nombre, que también funciona como verbo, ya habría sido eso, un trauma total.
Sí, sí. Esto les ocurrió a mis tíos, que tuvieron un hijo, mi primo, y querían ponerle Marco. Creo que ya he contado esta historia en el podcast, pero bueno, para quien no la haya escuchado, Marco, Paco, un nombre muy bonito.
Sí, pero se está poniendo muy de moda en España. Entonces Marco, sí, es un nombre muy bonito, me gusta mucho.
Pero a mí, aunque me gusta, nunca se lo podré poner a mi hijo, porque mis tíos querían ponérselo a mi primo y la familia les marco bolas. No, no le pongas ese nombre. Para quien no lo entienda, marco viene el verbo marcar. Cuando marcas bolas significa que el pantalón está muy ajustado y se ve la figura de tus testículos. Entonces, ese nombre descartado.
Y en caso de que sea chica, pues no podrás llamar a tu hija Dolores, Dolores Bolas, porque no es un buen nombre tampoco.
Y Paco, estoy un poco triste porque estaba pensando un día esto es real, Rebeca y yo estábamos pensando en nombres de niñas, bueno, lo típico que hablas de qué nombre le pondremos a nuestros hijos. Y pensamos en nombres de mujer, de niña, y pensamos en Lucía. Y nos gustó mucho.
Lucía es muy bonito cuando no tienes mi apellido. Porque cuando tienes mi apellido, vas por ahí enseñando tus bolas porque eres Lucía Bolas.
Lucir es como mostrar, presumir, hacer que los otros vean algo. En este caso, bolas.
Claro. Entonces, si tú dices que Lucía Bolas es que iba enseñando sus bolas con orgullo, incluso dirías bueno, pues eso, tenemos que esforzarnos mucho en elegir el nombre de nuestros futuros hijos porque puede haber problemas por culpa de mi apellido.
Volviendo a lo que decíamos antes, Roi, la influencia que puede tener el nombre, que puede tener el apellido en la vida de una persona. Estaba pensando que en español, por ejemplo, hay muchísimos apellidos de profesiones, como en otros idiomas también. Entonces, alguien que se apellide Carpintero, que se apellide Zapatero, que se apellide Pastor, pues es posible que eso desde pequeñito lo tenga en la cabeza y en el futuro pues ya sea más fácil elegir una profesión.
Esa es la teoría. No significa que tú te apellides Pastor o Zapatero, ya vayas a tener esa profesión, pero que haya una ligera inclinación mayor que la media.
De hecho, ahora he mencionado los estudios, los estamos dejando para el final. Parecemos un programa de estos de de dejar para el final lo más interesante. Pero bueno, es porque como hemos estructurado el episodio, lo contamos al final. ¿Qué pasa? Que esto es muy sutil, muy ligero, tampoco hay una diferencia tan grande.
Y los estudios dicen que es por el nombre, no por los apellidos. No sé si hay estudios sobre los apellidos, pero bueno, Paco, estoy pensando que hubo un presidente de España que era zapatero en el 2004, más o menos. Entonces estoy pensando que zapatero un zapatero es una persona que arregla cosas. ¿Que arregla zapatos, concretamente, o que también los vende?
Te vende zapatos, te intenta convencer de que compres unos zapatos. Es verdad, es verdad. ¿Pero bueno, mi teoría es que zapatero, como tenía ese apellido el presidente, por qué se hizo presidente? Porque él quería arreglar cosas. ¿Y qué hay más importante que arreglar un país, Paco?
Entonces por eso se hizo presidente. ¿Qué te parece mi teoría sobre la influencia de su apellido?
No sé si te compro la teoría, pero lo que sí te puedo decir es que creo que él no arregló el país.
Eso está claro. Hizo cosas buenas en algunos aspectos, pero en cuanto al aspecto económico, fue unos presidentes peor recordados, sin duda. ¿Pero bueno, Paco, qué te parece si hablamos de Usain Bolt, por ejemplo? Porque su apellido, aunque sea en inglés, pero Bolt creo que es trueno, rayo. Bueno, no estoy seguro de la traducción concreta.
Sí, porque corre como un rayo. Corre como un trueno. O corría. Ahora ya me imagino que un poco menos.
Seguirá corriendo. Ya no correrá tan rápido, pero seguro que más rápido que tú y yo. Y el 99 % de la población seguro que es. No, creo que ahora no, no, yo ahora solo ando. Yo ya no corro.
Él seguirá corriendo. Pero fíjate qué coincidencia. O quizás no, porque su apellido menciona un elemento muy rápido, un elemento de la naturaleza muy rápido y él es otro elemento de la naturaleza muy rápido.
Eso es como no sé. Había una historia, Roi, de un doctor, un cardiólogo, que se apellidaba Hart corazón.
Vale, otro ejemplo. Te voy a dar un ejemplo más gracioso todavía. A ver, estos son ejemplos anecdóticos, por supuesto, pero hay un me río.
Es que hay un doctor que se llama Richard Chop y a ver si adivinas a qué se dedica. Paco, Richard Chop.
Pues es urólogo. Y es un urólogo especializado en vasectomías. Paco, doctor Richard Chopp, el mejor doctor de vasectomías de toda América probablemente.
Porque su apellido se traduce al español como cortar. Y recordemos que él hace vasectomías.
Exacto. Entonces una vasectomía es esa operación que se hace un hombre para no tener hijos, para que su semen no lleve espermatozoides. Y claro, cuando te hacen una vasectomía, yo no sé muy bien cómo es esta cirugía, pero popularmente decimos que te cortan ahí abajo un tubo o algo así.
Entonces, el doctor Richard Chop, el mejor doctor de vasectomías de toda América. Yo lo recomiendo mucho.
Pero con ese apellido, Paco, yo confío en él. De hecho, estoy pensando que con mi apellido debería haber sido urólogo yo también. El doctor Bolás. Imagínate, vas ahí al médico por algo de la próstata o lo que sea, y de repente doctor bolas.
Bueno, pues Paco, hay otro ejemplo también parecido con esto. Un fontanero, también inglés o americano, no sé exactamente qué país, pero bueno, un hombre en inglés era fontanero y tenía una empresa de retretes y se llamaba Thomas Crapper.
Ya sabemos lo que significa inglés más o menos. Bueno, la mejor empresa de retretes del.
Mundo, seguramente la publicidad ya no hay que ser muy creativo ahí, porque la publicidad estaba hecha él con un anuncio en la calle grande con su apellido y diciendo que era de una empresa de fontanería, ya tenía el anuncio hecho.
Bueno, pues estos son algunos ejemplos anecdóticos. Obviamente aquí no hay ciencia detrás de esto, seguramente son casualidades de la vida y tiene gracia.
Pero ahora ya vamos a mencionar esos estudios o esas teorías que sí que se han visto, se han contrastado en algunos estudios concretos. Y la primera es el concepto del egoísmo implícito que dice Paco que las personas nos sentimos atraídas por cosas que se parecen a nosotros. Y concretamente, si hablamos de nombres, nos vamos a sentir atraídos por cosas que se parecen o que nos recuerdan a nuestro nombre.
Entonces es posible que no sea una casualidad tan grande, sino que si mi apellido es carpintero, pues voy a ir formando o tomando decisiones en mi vida para finalmente dedicarme a la carpintería.
Claro, esto no significa que si tú tienes ese nombre o ese apellido ya vayas a dedicarte a eso. Simplemente tu probabilidad de dedicarte a algo que se parezca a tu nombre es más alta. 1 Ejemplo es en un estudio que hicieron EEUU y vieron que había un porcentaje más alto de lo normal de dentistas que se llamaban Denise o Denise. ¿Y por qué? ¿Su teoría es por qué Denise o Denise se parece a dentist?
Suena como dentist. Y de verdad, ellos concluyeron que si te llamabas así, tenías el doble de probabilidades más o menos de ser dentista que otra persona normal.
Eso es interesante. Sí, sí, sí. ¿Entonces este estudio no está inventado, Roi, me confirmas que es de verdad?
Es de verdad, es de verdad. Luego habría que ver si realmente el estudio está bien hecho y tal. ¿Tampoco nosotros aquí hacemos ciencia, vale?
Esto no es el Medical Journal de Medicine o algo de eso. No, no nos equivoquemos. Y también mencionaban que por ejemplo, los ferreteros, las personas que tenían una tienda de ferretería, que inglés es Hardware Store, tenían un 80 % más de probabilidades de tener nombres que comienzan con H por Harvard Store. ¿Qué te parece, Paco?
Sí, sí. Es curioso. También encontraron que personas con nombres como Luis era más probable que viviesen en ciudades como Louisville.
O solamente con la letra inicial. También funcionaba. Por ejemplo, yo me llamo Royal. Pues es más probable que yo si tengo que elegir entre Ronda y Málaga vaya Ronda. ¿Claro, esto es algo que influye muy, muy poco, vale?
No significa que yo diga Uy, voy a ir a Ronda. Pero quizá si la decisión es muy parecida entre ir a Ronda y a Málaga, subconscientemente podría acabar eligiendo Ronda porque suena a Roi.
Vale, pues Roi, ahora ya sé por qué yo soy profesor y es que mi nombre es Paco. Entonces Paco, profesor empiezan por la p. Por supuesto.
Todo tiene sentido. Y yo soy Roi y soy locutor de podcast. 1 podcast es como la radio, Roi. Radio.
Estaba destinado a dedicarme a la radio y hoy en día la radio, pues el podcast es la radio moderna.
Y acabo dándote el último dato ya que confirma toda esta teoría y ya no no hay que hacer estudios ni nada porque está confirmadísimo. ¿Sabes cómo se llama mi pareja?
Venga, pues ahora animamos a los oyentes que nos digan su nombre o su apellido y que busquen si hay alguna alguna coincidencia como esta. Yo he conocido alguna historia así, por ejemplo, un amigo se llama Neil y su pareja se llama Nadia, con n también.
Pues ro, yo hasta ahora creía en el amor, pero después de esto ya voy a dejar de creer en el amor y voy a creer en la fuerza del nombre, de los nombres, de las iniciales. Precisamente.
Entonces ya sabéis, si estáis buscando un trabajo, enviad currículums a una empresa que empiece por la misma inicial, seguro que.
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Hoy hemos hablado de la influencia del nombre. La conclusión es que puede ser que influya un poquitito, pero bueno, muchos de estos casos serán anecdóticos. Pues nada, Paco, cuídate mucho y hablamos la semana que viene.