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Hoy hablamos Episodio 2029 las alergias Bienvenido a hoy hablamos, el podcast para aprender español cada día. Oyente, si te haces suscriptor premium podrás escuchar el catálogo completo del podcast con más de 2000 episodios que incluyen episodios de gramática y todos los episodios del podcast premium. Ese contenido te ayudará a mejorar tu español. Hazte suscriptor premium en nuestra web hoy hablamos. ¿Hola, oyente, qué tal?
El cuerpo humano es una maquinaria que funciona de una manera realmente sorprendente. Una de las cosas que hace es reaccionar ante lo que le hace mal. Nos pica un mosquito y nos sale una roncha, nos damos un golpe y nos sale un moratón, nos sienta mal una comida y vomitamos. Pues bien, hoy vamos a conocer un poco más sobre la reacción de nuestro cuerpo ante elementos que considera que no son buenos. Hoy hablamos hablamos de las alergias.
Según la Organización Mundial de la Salud, más conocida como OMS, en la actualidad entre 400 y 600 millones de personas padecen algún tipo de alergia. Pero la cosa no se queda ahí, ya que se estima que para el año 2050 la mitad de la población será alérgica a algo. Así que podríamos decir que la mayor parte de la gente o somos alérgicos o tenemos una alta probabilidad de serlo en un futuro. Por eso, para que nada de esto nos coja desprevenidos, vamos a dedicar el episodio de hoy a hablar de las alergias. Y por si tienes curiosidad, yo formo parte de los que sí tienen alergia.
Concretamente tengo alergia al polen. Ahora ya sabes en qué me he inspirado para hablar sobre este tema. Estoy seguro de que todo el mundo sabe lo que es una alergia, pero para curarnos en salud, vamos a ver cuál es su definición. Podríamos decir que se produce una alergia cuando nuestro cuerpo, cuando nuestro sistema inmunológico, reacciona ante algo inofensivo para la mayoría de las personas, pero que nuestro cuerpo lo percibe como nocivo, lo percibe como algo malo, aunque en realidad no lo sea. Esas sustancias que provocan esta reacción se conocen como alérgenos.
Hay muchos alérgenos y ahora veremos cuáles son los más frecuentes, pero las alergias se suelen dividir en tres grandes tipos. ¿Cuáles son estos tres grupos? Pues mira, son las alergias alimentarias de interiores y estacionales. Conozcamos un poco más sobre cada una de ellas. Las alergias alimentarias, como su propio nombre indica, se producen cuando el cuerpo reacciona ante algún alimento, más bien contra la proteína de ciertos alimentos.
Los nueve grandes alérgenos alimentarios la leche, los huevos, los cacahuetes, los frutos secos, el marisco, el pescado, el trigo, la soja y el sésamo. Cuáles son los síntomas más frecuentes ante una reacción alérgica alimentaria un hormigueo o picor en la boca o la garganta, pueden hincharse los labios, la lengua, la cara o la garganta. Aparecen ronchas que pican en la piel, lo que se conoce como urticaria, congestión nasal, picor de ojos y estornudos, reacciones estomacales como vómitos, diarrea o calambres en el estómago y en el peor de los casos, anafilaxia. ¿Esto qué es? Esto, que no solo ocurre con las alergias alimentarias, sino también con ciertos medicamentos o con picaduras de insectos, es una reacción grave a un alérgeno que pone en peligro la vida de la persona.
Es eso que hemos visto en películas y que seguro que nos suena cuando la persona en cuestión empieza a tener problemas para respirar y hay que inyectarle epinefrina para que sobreviva. Veamos ahora las alergias de interiores, que se pueden producir todo el año y que las provocan sustancias que se encuentran, por ejemplo, en el interior de las casas. Las más comunes de esta categoría las alergias a la caspa de los animales, los ácaros del polvo, el moho y las cucarachas. Los síntomas más habituales picor y congestión nasal, un goteo en la nariz, ya sabes, esa especie de moco líquido que gotea, estornudos, ojos rojos, picor, lágrimas e inflamación en los ojos, picor e inflamación en la garganta, tos, dificultades para respirar normalmente o una opresión en el pecho. Por último, vamos con las alergias estacionales, que también se conocen como rinitis alérgica estacional y que se producen en ciertas estaciones, siendo la más frecuente la primavera.
Los alérgenos más comunes en este tipo de alergia el polen de los árboles, las gramíneas y las malezas. ¿Cuáles son los síntomas más usuales en este tipo de alergias? Suelen estornudos, picor en la piel, ojos, nariz y paladar, goteo y congestión nasal, ojos llorosos, hinchados y rojos en eso que se conoce como conjuntivitis alérgica y cansancio. Esto es más o menos lo que siento yo cuando estoy en la calle en una zona con árboles o flores en un día de primavera. No es muy agradable.
Dicho esto, existen otros tipos de alergias que no están en esta clasificación, como pueden ser las alergias a medicamentos, a la picadura de ciertos insectos, a ciertas sustancias por contacto o al sol. ¿Qué tratamiento existe para las alergias? Atención. Se viene una obviedad. El principal remedio contra las alergias es mantenerte lejos de los alérgenos que te causan alergia, pero todos sabemos que eso no es siempre posible, así que veamos qué tratamientos existen hoy día los principales tratamientos son medicamentos antihistamínicos, descongestionantes, corticoides, inhaladores para el asma bronquial y colirios para los ojos.
La otra opción de tratamiento es la vacunación o inmunoterapia, que consiste en inyectar en el cuerpo el alérgeno en pequeñas cantidades para que el cuerpo se vaya habituando a él. ¿Si te parece, oyente, vamos a centrarnos en el tipo de alergia estacional para hacernos la siguiente por qué hay más alergias en primavera? La respuesta a esta pregunta tiene un nombre propio, el polen. Sí, el polen es el responsable de que en esta época del año se incrementen las alergias. ¿Por qué?
Todos sabemos lo que es el polen y lo hemos visto de cerca cuando nos acercamos a las plantas, sobre todo a esas flores vistosas donde vemos a las abejas polinizar. Pero ese polen no es el que causa la mayoría de las alergias. El polen que más alergias causa es uno más pequeño y que está presente en árboles, pastos y malezas. Las plantas que se reproducen por el viento. Es un polen más ligero y es transportado por el viento.
Esas plantas liberan su polen en primavera y ahí es cuando las personas alérgicas sufren, porque el aire es como veneno para ellas. Dentro de la primavera, los días de viento son cuando más presencia habrá de polen en el ambiente. En cambio, los días de lluvia el aire estará más limpio y por lo tanto, más libre de polen. ¿Qué puedes hacer si eres alérgico? Aquí van algunos evita salir en días de mucho viento, mantén las ventanas cerradas en casa, usa gafas de sol para proteger los ojos y si es posible, dúchate y cámbiate de ropa al llegar a casa para eliminar el polen acumulado en el cuerpo.
En casa también puedes tener un purificador de aire con filtro HEPA para eliminar las partículas de polen que pueda haber en el aire de tu casa. Algo curioso que me ayudó mucho a mí fue la mascarilla cuando estábamos en la pandemia, porque al usar mascarilla tu boca y nariz están protegidos del polen. Sin embargo, no la uso porque aunque me quita la alergia bastante, es un poco raro ir con mascarilla por la calle en España y tampoco es muy cómodo. ¿Decíamos al principio del episodio que para el año 2050 la mitad de la población sufrirá algún tipo de alergia y seguramente tú te habrás dado cuenta de que cada vez hay más personas alérgicas, así que nos hacemos la siguiente por qué ocurre esto? Empecemos por las alergias estacionales.
Cada vez hay más alérgicos en primavera y cada vez las alergias estacionales son más intensas. Y esto es en gran medida por factores ambientales. Por ejemplo, si hay sequía hay más alergias debido a que el árbol, al tener falta de agua, por puro instinto de supervivencia, genera y expulsa más polen. Claro, como hemos visto antes, si no llueve hay más polen en el ambiente y más personas sufren alergia. Otro factor crucial en las alergias estacionales es la contaminación.
Pero esto no te lo voy a decir yo, vamos a ver las palabras de un experto. La contaminación supone un agravante de los síntomas que provoca la alergia y puede hacer que nuestro sistema inmune tenga más predisposición a desarrollar una alergia. Al fin y al cabo, también son partículas que están en el aire y que hacen de conductor de las partículas de polen, provocando que estén más tiempo en el aire. Además, ya suponen de por sí un elemento irritante para el tracto respiratorio, lo que inevitablemente va a contribuir de forma negativa a nuestros síntomas. Es decir, temperaturas más cálidas, más contaminación y menos lluvia hacen que haya una mayor concentración de polen en el aire y, por lo tanto, más personas sufriendo alergia.
Pero las alergias provocadas por el polen no son las únicas que están aumentando, sino que también está creciendo el número de alérgicos en general. ¿Qué otros factores contribuyen a esto? ¿Por ejemplo, por qué cada vez hay más personas con alergias alimentarias? Pues bien, aquí parece que también influyen varios factores, aunque están relacionados entre sí. Por un lado, tenemos que hablar del sistema inmunológico, que es el que reacciona ante los alérgenos.
Parece ser que una de las causas del aumento de personas alérgicas es que hay un cambio en el sistema inmunológico. Es decir, por cambios ambientales o en los hábitos alimenticios, nuestro cuerpo ha modificado su respuesta ante ciertos elementos. Un factor que los expertos consideran clave en el aumento de las alergias es el llamado efecto higiene. Nuestra sociedad es cada vez más limpia y esterilizada y eso tiene muchas ventajas, pero también puede influir en el desarrollo del sistema inmunológico. La teoría sugiere que al estar menos expuestos a bacterias y microorganismos desde pequeños, nuestro sistema inmune no recibe los estímulos necesarios para fortalecerse y regular su respuesta.
Como consecuencia, puede reaccionar de forma exagerada ante sustancias inofensivas como el polen o ciertos alimentos. Esto explicaría por qué en países con altos niveles de higiene hay más alergias que en aquellos donde hay menos higiene y la población se expone más a las bacterias y a otros microorganismos. Otro factor importante son los hábitos alimenticios, es decir, lo que comemos. En las últimas décadas la dieta ha cambiado y muchos alimentos procesados contienen aditivos o han sido sometidos a modificaciones que pueden afectar nuestra respuesta inmune. Además, el estilo de vida moderno y la falta de exposición temprana a ciertos alimentos pueden influir en el aumento de las alergias alimentarias.
Por ejemplo, durante una época se pensaba que era mejor evitar darle cacahuetes y frutos secos a los niños pequeños por seguridad y para evitar alergias, pero varios estudios han visto que esto provoca el efecto contrario. Los niños que no comen frutos secos a una temprana edad tiene más probabilidades de tener alergia a los frutos secos en el futuro. Si no quieres que tu hijo tenga alergia a los cacahuetes, mézclale algo de crema de cacahuete en su comida ya desde pequeño. También algunos procesos industriales pueden hacer que ciertos alérgenos sean más propensos a desencadenar una reacción. Por último, una dieta mala con muchos ultraprocesados y empeora la microbiota intestinal y esto puede estar relacionado con el incremento de alergias.
Hoy hemos aprendido bastante sobre las alergias. Si no tienes ninguna alergia, enhorabuena, perteneces a esa parte de la población que todavía se libra. Y si eres alérgico estacional, solo te deseo que pase lo antes posible. Hasta aquí el episodio de hoy y ya sabes, si te gusta este podcast y el trabajo diario que rezamos, tu colaboración sería de gran ayuda. Puedes colaborar con este podcast haciéndote suscriptor premium en hoyablamos.