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Hoy Rebe y yo hablamos de la manipulación y cómo las personas manipulamos o intentamos manipular en nuestro día a día.
Manipular a los oyentes, manipularte a ti para convencerte de cosas en las que no crees, qué te parece un poco perturbador.
Si este episodio fuera una película, acabamos de presenciar al malo de la película, a ese villano que está dispuesto a manipular a todo el mundo.
Intentaba convencer a la gente de que Batman era malo, de que Batman era el problema, de que la sociedad estaba muy mal por culpa de las élites o lo que sea, y que había que reventar con todo.
Es curioso, porque cuando habla sobre manipular a los demás, como tú has hecho al principio de este episodio, todos nos imaginamos exactamente eso.
Una persona malvada, una persona muy mala que quiere controlar a los demás y que tiene ideas negativas.
Pero realmente la manipulación es algo que está presente en el día a día de todos.
Otras que quizá no son personas muy buenas, pero tampoco muy malas, están ahí en la media y manipulan más.
Si tú eres fiel a una causa, eres de una ONG, de un partido político o de lo que sea, hay una causa concreta en la que tú crees mucho, pues seguramente intentarás manipular a otras personas para que crean en tu causa.
Porque si tienes mucha convicción de una causa, de una ideología, de lo que sea, es fácil que a veces caigas en la manipulación, en los argumentos, en lugar de intentar convencer, sino que muchas.
En medios de comunicación, anuncios publicitarios, en un montón de cosas se trabaja con la manipulación para convencer a los demás sobre alguna idea o sobre comprar algo, por ejemplo.
Entonces puede ser algo más sutil, algo que hace tu pareja un día y que casi no notas, o puede ser algo descarado que ves en la televisión, por ejemplo.
Entonces hoy Roi, vamos a hablar sobre este tema, la manipulación y diferentes ejemplos que podemos ver en nuestro día a día para que tengamos en nuestra mente un resumen de qué es cada cosa para que podamos diferenciarlo durante el episodio.
Convencer, digamos que es usar argumentos honestos y lógicos para que una persona piense de cierta forma.
Tú convences a alguien diciéndole los pros y los contras de algo y él decide si quiere esa idea o no.
Muchas veces cualquier emoción que se te ocurra para conseguir que la otra persona haga algo, no lo estás convenciendo con argumentos, lo estás sugestionando de cierta forma para que haga lo que tú quieres.
Y también manipular puede ser omitir información relevante, solo mostrar una parte de la información.
En el caso de un partido político, va a ser mostrar los datos que les interesan para que esos datos apoyen su relato, su historia, lo que ellos quieren vender o de lo que ellos te quieren convencer.
Y también en el caso de las relaciones de las personas, las relaciones de pareja, de amistad, de familia, también hay mucha manipulación y a veces no nos damos ni cuenta.
Y hoy vamos a ver varios ejemplos cotidianos de cómo usamos también la manipulación con otras personas sin darnos cuenta muchas veces.
Claro, durante este episodio seguramente muchas personas se darán cuenta, o nosotros también, de que a veces hacemos alguna de estas cosas y no lo hacemos con mala intención o siendo conscientes de que queremos conseguir algo, pero somos humanos y al final muchas veces también nos dejamos llevar por nuestras propias emociones y acabamos recurriendo a la manipulación como una herramienta para conseguir algo.
Claro, si estás hablando con un robot, con una inteligencia artificial o lo que sea, va a ser lo más racional posible o lo más imparcial posible.
Pero cuando hablamos con humanos, o en las relaciones entre humanos, a veces las emociones nos nublan un poco.
Y vamos a empezar con el chantaje emocional, que esto es lo más típico que se hace en pareja, con los amigos, con la familia, que al final es usar las emociones en contra de la otra persona.
En lugar de intentar convencerla usando argumentos racionales o simplemente diciendo lo que quieres, intentas manipular haciendo sentir culpable a la otra persona o cosas así.
Lo típico que tú quieres hacer un plan, tu pareja quiere hacer otro y no estáis de acuerdo.
Y en lugar de hablarlo y decidir cómo hacer, al final una persona bueno, haz lo que quieras.
Pero lo dice con ese tono Rebe, que en realidad no está diciendo haz lo que quieras, está diciendo algo así yo quiero hacer esto y haz esto conmigo.
Es una forma de convertirte un poco en una víctima para que la otra persona haga lo que tú quieres.
Entonces imagí hoy vamos a cenar en casa, vamos a elegir qué cenar y estamos discutiendo o debatiendo sobre qué vamos a cenar.
Entonces te estoy diciendo, pide lo que tú quieras, pero si no pides lo que yo quería, me voy a enfadar y voy a ser la víctima que se sacrificó, la persona que cedió.
Entonces lo más probable es que tú acabes pidiendo lo que yo quería para no quedar como el malo, como la persona que fue egoísta y decidió.
Es que cuando una persona usa esta estrategia en la pareja, obviamente es algo que no es tan grave.
Todos lo hacemos en algún momento y oye, bueno, son cosas que se hacen y no es el ejemplo de manipulación más terrible que podemos encontrar, pero es un ejemplo muy cotidiano.
Y cuando tú haces esto con tu pareja, estás poniendo a tu pareja en una situación en la que no puede ganar.
Porque si pide la comida que él quiere o que ella quiere, tú vas a estar enfadado, pero si pide la que quieres tú, sí, tú vas a estar contento pero él no, entonces va a perder de cualquier manera.
Y oye, si no quieres manipular, pues simplemente tenemos que llegar a un acuerdo con la otra persona.
Y un ejemplo es cuando una persona se hace la víctima, que yo creo que suelen ser más los padres, sobre todo cuando son más mayores, cuando ya hablamos padres de sesenta, setenta años.
Ahí pueden hacerse la víctima o usar la culpa para que su hijo o su hija haga algo, haga algo por ellos.
Y aquí lo típico, lo típico es hacer referencia a todo lo que ha hecho por ti tu padre o tu madre.
Entonces, por ejemplo, si tu padre quiere verte más y tú no vas a verlo mucho, te puede decir algo así como ya nunca vienes a ver a tu padre o con todo lo que he hecho por ti y no te pasas nunca por aquí.
Entonces ahí es un poco chantaje emocional, porque en lugar de hijo, me gustaría verte más.
Apelas a la emoción, haces que la otra persona se sienta mal, se sienta culpable para que vaya a verte.
Y hay que tener en cuenta una cosa y es que cuando recurres a la manipulación, en este caso un padre, es un sentimiento que tiene esa persona.
Ella puede pensar que tú no vas lo suficiente, pero tú quizá consideras que sí, por eso va a intentar hacerte sentir mal y como sugestionarte para que tú pienses que no, que no haces suficiente, aunque tú al principio estuvieses contento con lo que estabas haciendo.
Y tampoco vamos aquí a culpar solo a los padres de hacer esto, porque también lo hacen los hijos un ejemplo muy típico, lo vemos cuando los hijos son adolescentes y cuando quieren algo, quieren conseguir algo, ¿No?
Oye papá, yo quiero esta cosa, quiero esta consola nueva porque creo que me la merezco, creo que he conseguido estas cosas o estos hitos, o he aprobado matemáticas o lo que sea, ¿No?
Qué te dicen papá, todos mis amigos tienen la consola, yo soy el único que No la tiene.
Entonces no es una decisión racional, está pelando la emoción, te está intentando manipular para que le compres la Play 5.
Puedes ver a un montón de hijos intentando hacer sentir a sus padres muy malos padres.
Imagínate, tú quieres ir con tus amigos al cine y tus padres pues no te dejan porque consideran que no es bueno que vayas al cine tú solo, muy tarde.
Tú eres muy mal padre y haces sentir a tus padres tan mal que acaban dejándote ir solo porque se sienten culpables, se sienten muy malas personas.
Hemos hablado de pareja, hemos hablado de padres, de la familia, podemos hablar también de amistades.
Venga Rebe, dame algún ejemplo de una típica manipulación que puede ocurrir entre amigos.
Pues esto puede llegar a ser un caso de manipulación, porque muchas veces puede que tus amigos no te digan tienes que beber e intenten convencerte, sino que intentan manipularte.
Diciéndote frases no seas aburrido, todo el mundo bebe, es una fiesta, estás aguándonos la fiesta siendo tan aburrido.
Ese tipo de cosas que intentan generarte a ti un sentimiento de culpa, de ser un marginado de no querer ser el aguafiestas, no querer ser la persona del grupo que aburre a los demás y acabar convirtiéndote en el aburrido del grupo.
Entonces te manipulan de tal forma que acabas bebiendo solo para no sentirte de esa forma.
Y es cierto que incluso puede haber algunos amigos que no intenten manipularte, sino que solo intenten convencerte de manera más o menos racional, convenciéndote de que oye, el alcohol es más divertido, te lo hace pasar mejor, te desinhibes más o lo que sea.
Pero bueno, en muchas ocasiones no se hace esto, sino que en muchas ocasiones hay manipulación.
Con los ejemplos tan buenos que has puesto tú y no sé si se me ocurre algún ejemplo más, Rebe, de amistades y manipulación.
Venga, cuéntame alguno, que yo sé que tú siempre manipulas muy bien a todos tus amigos.
Roi te voy a decir un ejemplo muy habitual también es cuando por ejemplo, quieres hacer un plan.
Por ejemplo, todos tus amigos están proponiendo diferentes ideas de un plan para este fin de semana, pero tú quieres hacer algo en concreto o no te apetece algo en concreto por la razón que sea.
En vez de decir directamente yo no quiero hacer esto y quedar a lo mejor mal con esa persona que lo propuso, o quedar como el aburrido porque no quiere hacer algo, intentas como sabotear al resto manipulando.
Buscas argumentos negativos sobre eso y sueles hacerlo de forma sutil, dejando caer algunas frases y.
Por ejemplo, imagínate que estáis hablando sobre organizar un viaje y cada persona propone un tipo de viaje.
Así que empiezas a buscar las cosas maravillosas que tiene tu plan y las negativas que tienen los planes del resto.
Tu plan es maravilloso porque no vas a tener que esforzarte en organizar nada, porque va a ser muy fácil, todo el mundo se va a divertir, pero el país que eligió esa persona es inseguro.
Podemos tener algún accidente, pueden robarnos la idea de otra persona, va a generar muchos costes, va a ser muy costoso, va a haber que hacer mucha organización, muchos planes.
Entonces al final manipulas a todo el mundo para que vea que tu idea es la mejor y no lo haces diciendo los pros y contras de verdad.
Claro, o sea, a lo mejor tu amigo dice, bueno, pues vamos a Francia y tú compartes una noticia de que en Francia hubo unos disturbios o algo.
Entonces ya los convences un poco y estás manipulando porque no estás viendo los datos de forma más objetiva.
Te pones a ver los datos de forma profunda, envías esa noticia o lo que sea y ya manipulas un poco y ya convences al resto de amigos.
Y ya no te digo, si en vez de exponer esto a nivel de grupo, vas poco a poco con cada miembro del grupo, te acercas a uno, uff, la idea de fulanito, creo que vamos a gastar mucho dinero.
Luego vas a junto de otro, la idea de menganito, viste ese país, yo creo que ahí vamos a tener problemas.
Bueno, al revés, yo tengo un poco de miedo ahora porque lo has explicado tan bien.
Nos has hecho aquí un plan maquiavélico de manipulación de amistad para conseguir el viaje que tú quieres y no el que quieren tus amigos.
Y no diré nada, Roi, pero voy a hacer un viaje con mis amigas al sitio que yo quería.
Es algo natural que cualquiera de nosotros, si quiere que un plan triunfe, no tiene que ser un plan increíble.
Entonces, bueno, acabas intentando convencer al resto del grupo o manipular para que escojan.
No estás convenciendo de que hagan algo muy extremo o de que tomen una decisión que puede perjudicarles en su vida.
Por ejemplo, en mi grupo de amigos, tú dices una tontería, pero bien construida, y de repente todos como que venga, venga, pues sí, vamos a hacer eso sin pensarlo mucho.
Entonces, cuando te pones con argumentos, esto es mejor, esto es peor, a mis amigos los pierdes, desconectan, dicen, no me interesa, tío, eres un aburrido.
Entonces, también cuando organizamos el viaje anual, yo tengo preferencias, por supuesto, e intento manipularlos un poco, o al menos hablar en su lenguaje y dar ciertas ideas o ciertas sugerencias para ver si los convenzo.
También te digo, realmente la manipulación, aunque suene muy mal, muchas veces es un recurso más que usamos para obtener algo que queremos, ¿No?
Es diferente manipular un poco para conseguir ir a la playa un día o cenar italiano, que usar la manipulación para hacer sentir mal a otra persona, para jugar con sus sentimientos, su autoestima.
Bueno, pues, Rebe, ahora vamos a hablar de un tipo de manipulación que sí que es bastante mala, es bastante terrible.
Suele ocurrir en relaciones de pareja, también puede ocurrir en familia, en amigos, pero se ve mucho en pareja, con novios, con matrimonio.
Y es el famoso gaslighting, que esta es una palabra que viene del inglés y no hay una traducción concreta al español.
Y el gaslighting es cuando haces creer a la otra persona que tiene una visión distorsionada de la realidad, que lo que esa persona está diciendo no es cierto o no ha pasado.
Es como que le estás diciendo, no te diste cuenta de lo que estaba pasando, no oíste bien, no lo viste bien.
Imagínate que tú estás discutiendo con tu pareja y bueno, en el calor del momento acabas de insultando a tu pareja o faltándole al respeto.
Al cabo de un rato volvéis a hablar y tu pareja te dice que oye, le dolió que la insultases de esa forma, que eso no deberías hacerlo.
En vez de asumir tu error y disculparte, le dices a la otra persona que se lo está inventando, que tú no le faltaste tanto al respeto, que quizá es que es demasiado sensible y se toma las cosas demasiado a pecho, que no se puede mantener una conversación con esa persona, que al final se deja llevar ella por sus sentimientos.
Entonces ahí estás manipulando la situación para hacer pensar a la otra persona que realmente es su culpa, que quizá se tomó la discusión de una forma que no debería, que quizá le dolió algo que no debería, que no era tan importante.
Entonces en este caso sí que es una manipulación muy dañina, muy negativa, porque estás jugando con los sentimientos de otra persona y también también un poco con su mente, claro.
Y es que esto al final, si lo repites mucho con tu pareja, vas a hacer que tu pareja tenga muchas dudas de lo que es verdad, de lo que no, que dude de sí misma, de que quizá tiene razón él y yo me estoy inventando las cosas, o soy muy exagerado o interpreto mal las cosas.
Y eso también destruye la confianza en uno mismo, porque ya no sabes qué es verdad, que no es verdad.
Cuando tienes muchas dudas sobre lo que ocurrió, sobre lo que no ocurrió, si tu pareja tiene razón o no, pues te puede destruir completamente por dentro.
Entonces te acabas convirtiendo como en un rehén de la otra persona, como un prisionero.
Porque da igual lo que la otra persona haga, que como te va a convencer de que lo que ha ocurrido es diferente a lo que tú has presenciado, pues siempre va a tener la razón y tú siempre vas a estar equivocado y tu vida va a ser bastante miserable.
Es muy habitual, por ejemplo, escuchar a alguien no fue para tanto, es que yo soy muy exagerada o muy exagerado.
Eso puede deberse a que habitualmente otra persona le diga que está precisamente exagerando con sus reacciones, con su comportamiento, cuando se enfada por algo.
Y lo más probable es que esa persona no sea exagerada, sino que realmente es algo que le molesta y la otra persona la está manipulando para que se vea a sí misma como una persona que exagera demasiado y que da demasiada importancia a algo que no lo tiene.
Yo creo que en algún momento de nuestra vida todos hemos hecho esto de forma inconsciente.
De hecho, tú y yo estábamos teniendo el debate fuera de micro sobre si alguno de nosotros hacía esto.
No es algo que hagamos frecuentemente ni de forma muy extrema, porque al final hay niveles y niveles y hay gente que es muy tóxica usando este tipo de manipulación.
Pero creo que casi todo el mundo en algún momento pues intenta convencer a otra persona de que no fue así, quizá porque tú tienes convicción de que realmente no fue así.
Pero bueno, yo creo que de manera subconsciente a veces también intentamos cambiar la percepción de otra persona.
Y no es lo mismo decirle a esto no fue así, o no exageres o te tomas esto demasiado en serio.
Es normal en el día a día con tu pareja, por ejemplo, en una discusión decir algo así.
Otra cosa es ya cuando intencionadamente recurres a la manipulación constante para siempre ganar una discusión o siempre hacer quedar a la otra persona como la culpable de todo.
Entonces Roi, vamos a ver ahora cómo detectar si nos están manipulando para poder evitar este tipo de situaciones.
Sobre todo si estás en una situación tan extrema o tan peligrosa como la que estamos mencionando ahora.
Si tú notas que un día tu pareja te manipuló para pedir pasta en vez de sushi, pues oye, eres consciente, pero puedes dejarlo pasar.
Si la relación va bien y no hay indicios malos ni tóxicos, ahora no intentemos hacer como un análisis profundo sobre si mi pareja me manipula o mi amigo me manipula.
Si esa persona te hace sentir culpable de forma muy frecuente, confundido, hace que tengas dudas de lo que ha pasado.
Si eso ocurre con mucha frecuencia, puede ser un indicio de que te está manipulando.
Es decir, tú a lo mejor otra persona te hace sentir culpable, pero porque tú haces cosas malas.
Si tú coges el coche y lo estropeas y lo rompes, oye, pues a lo mejor la otra persona te joder, rompiste el coche, ten más cuidado.
Una cosa es que te digan un dí oye, has hecho esto mal, pues has estropeado el coche en este caso.
Y otra cosa es que cada día, cada cosa que se daña en casa es culpa tuya, porque no haces bien las cosas, no tienes cuidado, eres muy torpe.
Otra forma de detectar que nos están manipulando es cuando evitan pedirnos las cosas directamente, y en cambio usan frases o dicen cosas para hacerte sentir mal.
Por ejemplo, si tú no haces algo, imagínate que tu madre quiere que la acompañes un día a visitar a tu abuelo, y en vez de decirte oye, vamos el viernes a visitar al abuelo, coge y empieza a decir cosas Nunca vas a visitar a tu abuelo, hace mucho tiempo que no vas porque pobre hombre, está muy solo.
Entonces está llevándote a tomar la decisión de ir con ella, pero sin decírtelo directamente, sino haciéndote sentir mal a ti si no lo haces.
A ver, que a lo mejor puede tener razón, a lo mejor hace mucho tiempo que no lo visitas o así, pero es mejor pedirle directamente a la persona o decirle oye, mira que hace tiempo que no visitas al abuelo, ¿Qué te parece si vamos esta semana?
Pero claro, cuando haces esas indirectas de nunca visitas a tu abuelo, hace mucho que no visitas, tu abuelo está muy solo, dilo directamente y ya está.
No hace falta hacer sentir culpable a otra persona para intentar que corrija ese comportamiento o que haga eso.
También otra forma de detectar la manipulación es que estas personas, las que manipulan, muchas veces son dramáticas.
Entonces si tú no haces lo que quieren, reaccionan con drama o de forma pasiva agresiva, como las frases que hemos puesto de haz lo que quieras o me da igual.
Pero exageran de tal forma una situación que acabas sintiendo que tienes que ceder.
Puedo exagerar mucho la situación para que al final te sientas presionado a hacer eso, porque si no es que eres una persona horrible.
Por supuesto esto no es una ciencia exacta ni nada, muchas veces todos hacemos alguna de estas cosas, Pero bueno, creo que el problema es cuando lo haces en exceso, cuando ya estás todo el tiempo haciendo esto y acabas convirtiendo esa reacción en una reacción tóxica y hay un desequilibrio entre las dos personas, entre tu pareja y tú.
Y Rebe, para acabar, quiero reflexionar sobre que manipular en general está mal, Pero eso no quiere decir que lo que tú quieres conseguir mediante la manipulación esté mal.
Esto lo podemos ver en un ejemplo que hemos mencionado mucho a lo largo de este episodio.
Quizá tú realmente ves que tu hijo no visita mucho a su abuelo y quieres que lo visite más.
Consideras que de verdad el abuelo está solo y que le vendría bien tener más compañía.
Si tú coges y vas adjunto de tu hijo y le dices, oye, no vas mucho a ver al abuelo, hay que ir a verlo más, está muy solo, necesita compañía, le vendría bien que vayas los sábados por la mañana a acompañarlo o a dar una vuelta, Eso está perfecto.
Así que intentemos convencer a las personas sin que se sientan culpables, sin manipular los datos o sin manipular lo que ha pasado.
Hemos hablado bastante sobre la manipulación, esta terrible técnica que usan nuestras novias para convencernos de que vayamos a ver películas que no queremos ver o de cenar.