This transcript has been generated automatically.
Hoy Hablamos Premium Episodio 313 Ser optimista y positivo con Rewe Hola amigos, amigas.
Nosotros ya llevamos horas hablando durante el día, entonces hacemos este saludo para que quede bien, porque es lo natural.
Claro, porque a ver, cuando escuchas un programa de radio, presentadores se saludan, saludan a los invitados, pero ya se han saludado antes, o sea, es todo fingido y queda muy natural.
Pero además, si lo piensas, nosotros no es solo que nos hayamos saludado, es que ya hemos desayunado juntos, hemos estado charlando, hemos dormido juntos.
Entonces, si lo piensas, para nosotros salir, saludarnos, no tendría sentido prácticamente ningún día, porque pocas veces nos separamos.
Para empezar, quiero preguntarte si te sientes optimista, si te sientes positiva el día de hoy.
Estás pensando ya el episodio ha empezado un poco raro con ese saludo de estoy genial.
Y Rebe, antes de nada, hay que tener el debate sobre si ser optimista y ser positivo es lo mismo o hay alguna diferencia.
Realmente no es lo mismo, aunque normalmente cuando hablamos solemos mezclar estos conceptos y hablar de ellos como un conjunto.
Una persona que es optimista piensa que el futuro va a ir bien y piensa que las cosas van a salir bien.
Pero por otro lado, la positividad es la actitud en el presente, es tener esa idea, pero ahora mismo.
No solo lo que va a pasar en el futuro, sino ahora mismo tener también una buena actitud.
Que generalmente lo más normal es que una persona positiva, una persona que siempre está viendo el lado bueno de las cosas, suele ser también una persona optimista hacia el futuro.
Por eso es raro hacer diferencia entre estos dos conceptos, porque suelen ir juntos.
Aunque bueno, a veces podemos encontrar una persona positiva, una persona que durante el día a día tiene una actitud muy buena, muy positiva, ve el lado bueno las cosas, pero que luego es un poco pesimista hacia el futuro.
Y digo esto porque quizá tú, Rebe, eres un poco así, no mucho, pero sí que eres una persona que eres muy positiva en el día a día.
Pero creo que más que el hecho de no ser optimista de cara al futuro, creo que me gusta como no gafar las cosas.
Esto que se suele decir de que si hablas muy bien del futuro, de lo que va a pasar, de que todo va a ir bien, puedes como estropearlo y hacer que no vaya tan bien.
Por eso creo que a veces me gusta ser más cautelosa, o quizá también por tema de expectativas.
No me gusta a veces pensar que algo va a ir súper bien, que algo va a ser genial, porque luego te puede defraudar, te puedes llevar un chasco.
Sí, yo no te definiría como pesimista, porque tú no es que pienses las cosas van a salir mal o el futuro lo veo mal.
Entonces, bueno, esto es ficción, no vamos a lanzar un podcast de español de negocios.
Entonces diría, pues a lo mejor conseguimos 5000 oyentes el primer año y puede ir muy bien y nos va a traer más ingresos y podemos tener más recursos para hacer nuevos contenidos.
Tú siempre vas a ser muy poco optimista como medida de protección, porque no quieres llevarte un chasco, no quieres sentirte defraudada en el futuro.
Como tú dices, yo soy muy positiva en el día a día, porque yo en el día a día sí que valoro mucho las cosas, Digo que todo va bien y no me enfado mucho por tonterías.
Tú te ilusionas muchísimo por el futuro, Piensas que todo va a ser increíble, pero luego en el día a día eres más negativo.
En el día a día tengo que esforzarme más en pensar de forma positiva y ver el lado bueno de las cosas.
Porque a veces sí que soy un poquito negativo, pero cuando pienso en el futuro siempre soy muy optimista.
Vamos a lanzar algo o vamos a hacer alguna cosa en el futuro y siempre pienso que todo va a salir genial.
No es solo que tú y yo seamos así, sino que hay distintos tipos de personas optimistas, pero también distintos tipos de optimismo.
El ingenuo es el pensar que todo saldrá bien sin actuar, sin hacer nada, sin ser realista con la situación.
Es como ser un estudiante que no está estudiando en absoluto, no está haciendo nada, pero seguro que me va a ir genial en el examen, voy a probar todo en verano, voy a irme de vacaciones.
Y es muy optimista, pero realmente no está siendo realista con la situación, solo confía en que todo va a ir bien.
Y luego está el realista, que es pensar que las cosas van a salir bien, pero siendo consciente de los obstáculos, de los retos que vas a enfrentar y de que puede que salga todo bien.
Claro, y siendo consciente de los esfuerzos que tienes que hacer, de las cosas que tienes que hacer para que eso ocurra.
De hecho yo tengo un buen ejemplo para esto Y tenemos que pensar en el típico friki, Un chaval, un chico que es friki, que juega mucho a los ordenadores, no sale mucho de casa.
Entonces claro, ¿Qué problemas tiene este adolescente o este adulto de 18 años friki?
Entonces ese chaval que no liga y puede estar un poco frustrado, tiene dos formas de ser optimista y una muy típica es el optimismo ingenuo, qué es cuando ya conoceré a alguien, el amor aparece cuando menos te lo esperas.
Bueno, quizás soy un poco raro y por eso no ligo y no conozco a nadie, pero siempre hay un roto para un descosido.
Es decir, siempre hay una persona rara que puede juntarse contigo, que también eres raro.
Pero claro, este optimismo es ingenuo porque si tú no sales de casa, no conoces a nuevas personas, no te juntas con amigos y con los amigos de tus amigos e intentas conocer a más gente, no va a salvar hablar con la gente.
Bueno, no haces este tipo de cosas, nunca va a llegar ese amor porque no va a llegar a tu puerta, no va a aparecer al otro lado del Fortnite, Tienes que salir, tienes que buscarlo.
Entonces el optimismo realista sería pensar bueno, es que no salgo mucho de casa, no conozco muchas chicas y por eso no ligo mucho, pero oye, puedo salir, puedo empezar a conocer gente nueva conocer amigos de amigos, y poco a poco conoceré a alguien.
Y ese sería el optimismo realista, que es consciente de sus obstáculos y de sus problemas, pero sabe que los puede superar.
Me gusta que has dicho que el amor no va a aparecer al otro lado de la pantalla del videojuego, pero quizás sí Roi.
Una persona optimista pensaría oye, igual un día estoy jugando y la persona que está al otro lado de la pantalla es como yo, está haciendo exactamente lo mismo.
Vamos a hablar ahora de otro tema relacionado con esto, que es la paradoja de Stockdale, que esta es una historia muy curiosa que leí hace tiempo en un libro de negocios.
Pero bueno, la paradoja sí que la recuerdo, porque la he buscado y la he anotado para recordarla bien.
Y es una historia que se cuenta mucho, sobre todo en ambientes de negocios y temas relacionados.
Entonces este soldado fue capturado por los vietnamitas durante la guerra de Vietnam y estuvo siete años prisionero.
Y lo que ocurría es que los prisioneros que eran más optimistas, los que seguro que en Navidad nos liberan.
Además dice que siempre hablaban de una fecha en Navidad, Acción de Gracias, el 4 de julio, su cumpleaños.
Es como que siempre pensaban en una fecha que tenía bastante significado para esa persona, y pensaba que ese día o antes de ese día los iban a liberar.
Seguro que estas Navidades ya estamos en casa con nuestras familias y ya somos libres.
Entonces él llegó a una conclusión, y es que tienes que ser optimista, tienes que tener fe en que al final vas a superar esa situación o vas a conseguir lo que te propones, pero tienes que también ser realista con las dificultades o los problemas que tienes.
Al final es un poco lo que te decía yo al principio de que me gusta ser una persona positiva y pensar que las cosas van a ir bien, pero a la vez no me gusta crearme esas expectativas, esas ilusiones, precisamente por lo mismo que dice él al final, cuando también te creas una imagen perfecta de lo bien que va a ir todo y luego no se cumple, vas a llevarte esa decepción.
Entonces hay que ser positivos y creer que las cosas te van a ir bien, pero tampoco crearte falsas expectativas.
Bueno, y hoy estamos hablando de ser positivo y ser optimista, porque la ciencia nos dice que tener esta actitud es bueno para nuestra vida.
Si tú eres una persona positiva y optimista, seguramente va a ser mejor para ti, vas a tener una mejor actitud y va a ser mejor para tu salud.
Entonces vamos a hablar un poquito de los beneficios de tener una actitud positiva y optimista.
El primero es el más claro, el más obvio, y es que si tú tienes una actitud positiva, va a hacer que disfrutes mucho más de tu día a día, Vas a estar de mejor humor, vas a estar menos estresado, menos enfadado.
Si tú te centras solo en las cosas buenas, o no solo centrarte en las cosas buenas, sino incluso las que no son tan buenas, intentas verlas con buenos ojos e intentas quitarle un poco de hierro incluso algunas veces, pues va a ser un día mucho mejor.
No es lo mismo tener un buen día y estar contento e intentar que todo sea lo mejor posible.
Pero si tú estás de muy mal humor, enfadado por todo y pensando que el día es una mierda, pues no vas a querer hacer nada.
Y a ver, muchos oyentes pensaré qué nos estáis contando esto es obvio, esto es una obviedad.
¿Cuántos de vosotros sois unos cascarrabias, sois unos protestones, sois unos quejicas seguramente bastantes, o bueno, no sé cuántos, pero una parte de los oyentes que nos escuchan, entre los que yo me incluyo, posiblemente somos un poco cascarrabias, o somos un poco quejicas, somos un poco negativos?
Sin darnos cuenta, muchas veces no somos conscientes de que, por ejemplo, en alguna situación concreta, nos volvemos malhumorados o nos enfadamos fácilmente.
Cuando una persona va al volante, se vuelve un ser horrible, la gente se enfada muchísimo, hay un montón de discusiones en la cartera.
Es como que subirte al coche cambia tu modo y te pones de repente ya de mal humor.
Entonces yo creo que dentro de un coche es donde ves claramente la gente positiva que intenta ver las cosas con mejor humor y la gente que no es tan positiva.
Lo de conducir debe de ser que como es un invento muy moderno, el ser humano no está adaptado para usar ese invento.
Tú ves a una persona normal, agradable, positiva, se pone a conducir, de repente hay otro coche delante que hace algo mal y tu amigo, que es muy tranquilo, empieza a gritar, empieza a insultar a la otra persona.
En unas cosas locas, persecuciones por la carretera, coches que se pican entre ellos, incluso peleas, obviamente no es que pase todos los días, pero a veces pasa.
Gente se enfada muchísimo por cualquier tontería y siguen enfadados durante mucho tiempo.
Yo es algo que noto, que tú vas en el coche, algún conductor hace alguna cafrada, hace algo mal y pues el conductor se enfada y el conductor de tu coche se enfada y va enfadado el resto del viaje hablando sobre la tontería que hizo ese coche, sobre lo mal conductor que es, insultando, Pero ya está, supéralo.
Yo aquí, Roi, voy a presumir Voy a, por primera vez decir algo bueno después de episodios diciendo que no hago deporte, que me duele todo, que siempre soy el caso malo.
Creo que es de las pocas cosas buenas así, de las que puedo presumir con orgullo.
Y cuando alguien hace algo malo, pues digo, mira, un mal conductor, no pasa nada, que vaya adelante y ya está, no me enfado.
Incluso cuando alguien conduce y se está enfadando, intento quitarle hierro y hacer que esa persona se relaje.
Antes sí que era de las personas que se enfadaba y tal, y pitaba cuando alguien hace alguna cafrada.
Cuando tú eres un cafre, eres una persona que te equivocas, que haces las cosas mal, eres torpe.
Y porque también me di cuenta de que nos enfadamos por comportamientos o por cosas que luego nosotros hacemos.
Un coche que entra mal en una rotonda o no cede el paso, y nos enfadamos porque ¿Qué hace este idiota?
Entonces yo creo que es muy buen ejercicio para practicar el positivismo y ver el lado bueno de las cosas cuando conduzcas, oyente, intenta no enfadarte cuando otra persona se equivoque.
Y no solo pensar en positivo, sino algo que se puede aplicar a la vida en general, no solo al positivismo, sino un ejercicio de empatía.
Y no somos conscientes de que esa persona, quizá va con prisa, quizá está teniendo muy mal día, quizá cometió un error.
Quizá se equivocó un momento, pues no sé, la gente tiene sus vidas, quizá esa persona acaba de despistarse un momento porque va pensando en una preocupación muy grave que tiene y vas tú y un por encima te pones a gritarle, a insultarle.
Sí, e incluso si piensas que la otra persona es idiota, pues ya está, es idiota, no le des más importancia, porque si no el idiota eres tú cuando te enfadas y estás 20 minutos de mal humor simplemente porque otro idiota conduce mal.
Y es que hay que reconocer una cosa, cuando tú estás con personas que son negativas, pesimistas, que siempre se están quejando, que siempre están viendo el lado negativo de las cosas, que nunca piensan de forma un poco positiva, no estás cómodo, ¿Verdad?
Las personas positivas, alegres, optimistas, siempre van a tener más amigos, más relaciones, van a triunfar más en este sentido, porque todo el mundo prefiere estar acompañado de alguien alegre, de alguien que te anima el día, que de alguien que se está quejando y está hablando de todo lo malo que hay en el mundo.
Por ejemplo, yo aquí tengo dos casos familiares, puedo ponerlos de ejemplo, porque tristemente ya fallecieron hace años, entonces no van a escuchar este podcast, no se van a sentir mal.
Pero yo tenía dos tías abuelas, unas mujeres muy mayores, que eran como los polos opuestos.
Entonces podías ver claramente en dos personas como una era la persona más optimista y positiva del mundo, y la otra lo contrario.
Con una te apetecía estar porque siempre hablaba de cosas buenas, incluso aunque estuviese mal, aunque estuviese enferma, nunca se quejaba, siempre decía que todo estaba bien, que había sido un gran día, contaba cualquier cosa que había hecho como si fuese lo mejor del mundo.
Mientras que la otra, sin estar tan mal, se quejaba un montón, decía que todo iba fatal, que la vida era muy dura.
¿Con quién te va a apetecer más pasar un rato con la persona que te alegra, que te anima, que te da ganas de seguir haciendo cosas?
Y de hecho ahí tenemos el siguiente beneficio de esta actitud y es que produce como un efecto contagio, o sea, tanto lo positivo como lo negativo.
Si todos tus amigos son personas positivas, optimistas y hacen lo que hacía tu tía abuela, ve el lado bueno de las cosas y no quejarse mucho, eso se transmite, tú vas a estar más contenta, vas a estar más alegre, vas a tener una mejor sensación.
Y de la misma forma si todos tus amigos o tu familia es muy negativa y muy pesimista, también te va a contagiar y tú poco a poco te vas a convertir en una persona negativa y pesimista porque si estás rodeado de gente que todos los días está fijándose en lo malo de la vida, tú te vas a volver igual.
Esto es un poco como en Harry Potter, los dementores de Harry Potter, ¿Que eran esos?
No sé qué eran, eran como unos fantasmas o algo parecido que cuando aparecían te quitaban la felicidad, te ponían muy triste, muy triste y tenías que hacer un Specto Patronum para echar a ese dementor.
Lamentablemente no hay un conjuro que podamos hacer, pero de verdad es que es igual que con los dementores en Harry Potter, si te rodeas de estas personas negativas es como rodearse de mentores y si los oyentes no conocéis esto, buscar en YouTube de Mentor Harry Potter veréis una parte de la película y ya está, ya entenderéis la metáfora.
Es fácil de ver en cualquier día, si tú te levantas y estás con tu pareja y tiene un gran día, está súper contenta, habla de cosas muy buenas, te va a animar a ti también.
Mientras que si tú te levantas y tu pareja ya se está quejando por todo lo malo, está hablando de cosas negativas todo el día, pues te va a acabar arrastrando un poco a ese pozo también.
Entonces este es otro beneficio que tiene ser positivo, que la gente va a querer estar contigo y vas a generar también en el resto de gente ese positivismo, vas a contagiarlo.
Y por último, si tú eres una persona optimista y piensas que las cosas van a salir bien y el futuro va a ser bueno, yo creo que eso te va a dar más motivación, te va a ayudar a ponerte metas ambiciosas y a perseverar.
Es decir, cuando las cosas te vayan mal, si tú eres optimista, eso te va a ayudar a seguir trabajando, a seguir esforzándote a pesar de los problemas o las dificultades.
Vas a tirar la toalla antes, porque si estás pensando todo el tiempo que no vas a conseguir algo, que para qué esforzarse, que total no vas a conseguir nada, pues no vas a seguir intentándolo.
Mientras que si eres positivo, como crees que las cosas finalmente van a salir bien, vas a seguir intentándolo, vas a luchar para conseguirlo aunque seas consciente de que va a suponer un esfuerzo.
Pero luego Roi, también hay que tener en cuenta una cosa y es que estamos todo el tiempo hablando del positivismo, de ser una persona positiva, que todo es mucho mejor.
A veces es normal y está bien estar triste, estar negativo y ser pesimista en algunos momentos concretos de tu vida.
Porque oye, no todos tenemos una vida maravillosa y algunas veces tenemos problemas, la muerte de un ser querido, una enfermedad o cualquier cosa que te hace estar triste.
Y ahí sí que podría ser un problema si intentas luchar contra esos sentimientos tristes que son naturales también.
Entonces ahí es donde no podemos volvernos locos y pensar que todo va bien a pesar de que tienes problemas en tu vida.
Aunque tú seas una persona muy positiva y muy optimista y siempre estés alegre, no pasa nada porque un día estés triste.
No tienes que sentirte ya mala persona o sentir que estás mal porque un día estés triste.
Entonces hay que aceptar también esas situaciones y no caer en un poco ese positivismo falso de todo va genial.
Y por último Rebe, para acabar vamos a ver algunos consejos prácticos para poder ser más positivo, optimista.
Muchas veces el hecho de ser una persona positiva o ser negativa es por el enfoque que tú le das a las cosas.
Entonces tienes como pensamientos muy negativos o el enfoque es de ¿Qué problema tengo?
Pues si intentas cambiar el enfoque de los problemas o los obstáculos que tú tienes, eso te puede ayudar a ser más positivo.
Por ejemplo, tú un día vas a ir a trabajar y se te estropea el coche, lo tienes en el taller.
La opción más lógica, la que haría todo el mundo menuda mierda de día, solo a mí me pasa esto justo ahora se me estropea el coche, va a ser un gasto, no voy a poder ir a trabajar, bla bla bla.
Otra opción bueno pues mira, voy en autobús, no tengo que complicarme en aparcar, puedo ir leyendo o leyendo el periódico, puede ser un buen día o por ejemplo esta tarde querías ir a dar un paseo al parque con tu pareja y tenías todo idealizado en tu mente y de repente está lloviendo muchísimo, otra vez lo mismo.
Podrías solo esto me pasa a mí, menuda mierda, justo ahora empieza a llover, yo que ya había planeado todo, me está estropeando el día, qué mal, o puedes oye mira, pues en vez de salir a pasear nos vemos una peli en casa, hacemos una cenita romántica y puedes buscar otra forma de disfrutar el día.
¿Entonces es cambiar el enfoque, reenfocar esas cosas negativas para no centrarte en lo malo, sino en que ahora tienes que hacer algo alternativo, tienes que hacer algo diferente y qué cosas buenas sacas de esa nueva situación?
De hecho tenemos muchos refranes sobre esto cuando una puerta se cierra, otra puerta se abre o al mal tiempo buena cara siempre.
O no hay mal que por bien no venga Realmente en español tenemos muchos refranes de este tipo para animarte y motivarte y decirte que aunque las cosas pinten mal o que no estés en tu mejor momento, todo va a ir mejor después.
Otra cosa que podemos hacer para ser positivos optimistas en nuestro día a día es aceptar los problemas y los imprevistos Tenemos que saber que la vida está llena de imprevistos, y que es normal que los días no sean perfectos y que algunas cosas no salgan bien.
Cuanto antes aceptemos que esto puede pasar, pues mejor, porque no vas a enfadarte tanto y pensar que todo es malo, sino que vas a bueno, pues es normal.
Porque yo antes era muy Me enfadaba mucho cuando había imprevistos o problemas inesperados.
Porque precisamente por eso tenemos la palabra imprevisto en el diccionario, porque es algo que no se puede prever.
Entonces, cuando tú te enfadas porque tienes un imprevisto, es algo absurdo, porque siempre va a haber imprevistos.
Sí que algunas veces pueden salir bien, pero en la vida siempre va a haber imprevistos.
Entonces, cuanto antes los aceptemos como una parte normal y natural de tu día a día, mejor.
Y otra cosa que se puede hacer para tener un buen día es disfrutar de los pequeños placeres, los pequeños detalles del día a día y ser agradecido.
Porque al final, muchas veces nos centramos en lo malo que nos pasa, en lo que no conseguimos, pero no valoramos tanto lo que sí tenemos, lo que sí estamos consiguiendo.
Pero también puedes pensar en las cosas buenas que también tener una familia, tener un buen trabajo, poder disfrutar ese día con tus hijos.
Entonces, ser agradecido por las cosas que sí tienes y disfrutar esos pequeños placeres del día a día, te van a hacer ser una persona más alegre, más optimista.
Muchas veces, sin darnos cuenta, pensamos en lo que no hemos conseguido, en lo que no tenemos, y nos olvidamos de todo lo que tenemos y de todo lo que hemos conseguido y todo lo bueno que hay en nuestra vida, que todos tenemos cosas buenas, pero si siempre nos centramos y siempre pensamos en lo que no tenemos y en lo que no hemos conseguido, esa parte es infinita.
Porque no tienes infinitas cosas y no has conseguido infinitas cosas porque eso nunca se acaba.
Entonces cuesta, hay que decir que cuesta porque los seres humanos tenemos como ese sesgo que hace que nuestro cerebro se centre en lo que no has conseguido y en lo que no tienes.
Cuando tú te centras tanto en las cosas malas, en tu día a día, acabas generando dentro de ti mismo un diálogo interno muy negativo, muy pesimista, centrado todo el tiempo, las cosas malas que te pasan, las cosas malas que haces, lo mal que te va todo, compararte muchas veces con otra gente que le va mejor o que tú consideras que les va mejor.
Entonces es bastante importante intentar cambiar esta forma de pensar, esta forma de verte a ti mismo, esta forma de analizar las situaciones para ser un poco más optimista, más positivo y centrarte un poquito más en las cosas buenas y poco a poco ir cambiando esa forma de ver las cosas.
Sí, porque al final te ocurre algo y los primeros pensamientos que tú tienes de ese evento que ha ocurrido, de ese hecho, definen mucho tu respuesta a lo que ocurre.
De hecho, esta es una de las técnicas que siguen los psicólogos que utilizan la terapia cognitivo conductual para ayudar a sus pacientes y es poco a poco ir cambiando el diálogo interior de los pacientes.
Porque muchas personas que tienen problemas mentales, no digo que todas, pero muchas sí que tienen un diálogo interior que les afecta mucho a su autoestima, a su día a día, y por eso también suelen estar sumidas en problemas.
Obviamente hay más causas, no solo eso, pero una parte de la terapia implica cambiar este diálogo interno para que sea más positivo, para que no esté centrado tanto en las cosas malas.
Nuestra conclusión es que ser optimista y positivo es lo que todos deberíamos intentar hacer.
Pero tranquilos oyentes, no os sintáis mal, porque por ejemplo, yo tiendo a ser más negativo que positivo.
Tampoco me voy a volver loco para cambiarlo de la noche a la mañana, pero sí que es verdad que para disfrutar más la vida y que todo vaya mejor.
Porque hoy hablamos del positivismo, la semana pasada, de movernos más para tener mejores condiciones físicas al final del año.
Pero bueno, con que solo hagáis el 10% de las cosas buenas que recomendamos ya es suficiente.
Porque nadie puede seguir los consejos de crecimiento personal y cumplirlos todos.
Estos episodios se resumen claramente en con la frase haz lo que yo digo y no lo que yo hago, Roi.
Es verdad, pero si vas al médico, quizá tu médico fuma, pero él te no fume, no fume, que es muy malo para salud.